Narcotráfico, una batalla que se está perdiendo
La delincuencia organizada ha logrado penetrar en una parte importante de la sociedad .
El Siglo de Torreón
Primera de cinco partes
Comarca Lagunera.- La venta de drogas en las calles es una realidad cotidiana. Empresarios y académicos señalan que la batalla contra la delincuencia la está perdiendo el Estado.
Civiles, sicarios, “narcomenudistas”, dirigentes de cárteles, policías locales, estatales y federales, funcionarios y hasta periodistas han sido víctimas de la ola de violencia que aumenta en el país, pues las ejecuciones ocurridas en lo que va del año (más de 500 homicidios) representan casi el 80 por ciento del total de las ocurridas en 2004.
Para Alberto Montes, presidente del Colegio Regional de Abogados de La Laguna de Durango, el poder del narcotráfico en México es enorme, a tal grado que se han dado el lujo de cometer grandes asesinatos, tanto de jefes de Policía como de abogados, “tenemos el caso de Sinaloa donde en promedio están asesinando un abogado cada cuatro meses. El poder del narcotráfico es enorme a grado tal que nos damos cuenta que hay hasta políticos que conviven con ellos, que se les ha visto en fiestas y en funerales, el último caso fue el diputado panista en Sinaloa que asistió al funeral de un ‘narco’ y posteriormente fue asesinado en condiciones propias del narcotráfico”.
Óscar Calderón Sánchez, procurador general de Justicia en Coahuila, reconoce que el avance del narcotráfico es palpable, es base de la economía de algunos países sudamericanos y evidentemente se ha registrado un aumento en el consumo. “Por si fuera poco está el caso de Tamaulipas, donde hay asesinatos de policías y ya no sabes si a los policías los matan por ser contrarios o de los mismos, hay una situación caótica y ha obligado a la Federación a intervenir. Definitivamente el problema sí ha crecido”.
Por su parte, José Luis Carrillo Rodríguez, procurador de Justicia del estado de Durango, considera que el poder de los narcotraficantes se basa en el dinero, pues la sustancia que venden es muy cara y logran obtener cantidades muy grandes, de ahí es que han sabido utilizar a algunas instituciones, no sólo las policiacas, para poder realizar sus operaciones de manera más fácil.
“Desgraciadamente han logrado penetrar en una parte importante de la sociedad, ahora con las drogas sintéticas que tienen un valor menor en su elaboración y además son muy fáciles y rápidas para su adicción. También ha afectado que los menores de edad tengan posibilidad de adquirirlas, pues si no completaban para comprar una dosis de cocaína, ahora con pocos pesos compran uno de los llamados ‘globos’ de ‘cristal’”.
Para Enrique Ruiz Arévalo, titular del Grupo Especial de la Policía Ministerial de Coahuila, antes no se escuchaba que había balaceras y ahora en Torreón ya las hay, lo que demuestra el poder del narcotráfico. “Esa gente se está peleando los terrenos, los lugares de venta. Han ido creciendo porque las mismas autoridades los han dejado que crecer. Hay que ponerles un marcaje, es lo que tratamos de hacer nosotros en este grupo, pero hay muchos puntos de venta, por cada uno que metemos a la cárcel aparecen tres o cuatro”.
Roberto Escárcega Montañez, titular del Centro de Integración Juvenil de Durango, advierte que el poder del “narco” es muy fuerte y que “ha afectado mucho que la venta de la droga en México se realice a través del ‘narcomenudeo’, se conoce a la gente que la vende pero nadie dice algo; inclusive, se ve entre familiares”.
Robert Stefanic Mery, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), delegación Torreón, igualmente acepta que el poder del narcotráfico en México es muy fuerte y ha alcanzado a altos personajes de la sociedad y de la política del país.
Señala que es un error que muchas personas lo tomen como algo común que está viviendo el país, ya que lo más peligroso es cuando la gente se acostumbre a ver el consumo y comercialización de la droga como algo normal y que no debe preocuparnos como Gobierno y ciudadanos.
Y mientras, son más las voces que advierten la gravedad del problema, para Tranquilino Juárez Ortega, delegado estatal de la Procuraduría General de la República (PGR), en Coahuila, la situación se encuentra en un límite permisible. “Habría que compararlo, si se hace con cualquier otro país del mundo, yo creo que no ha superado el ‘narcotráfico’ a México. Si se compara a Coahuila con la anterior, ésta ha crecido, pero tampoco ha rebasado. La población ha crecido y el consumo también, pero yo creo que está dentro de los límites”.
La fuerza del dinero
Octaviano Rendón Arce, alcalde de Gómez Palacio, explica que el poder más grave y más nocivo que genera el narcotráfico, es que esta actividad produce una cantidad enorme de dinero a quien trafica, lo que da motivo a que se generen millonarias cantidades de dólares que se pueden ofrecer, con la mano en la cintura, a distintas autoridades.
Esta visión es compartida por la alcaldesa de Lerdo, Rosario Castro Lozano, quien sostiene que el narcotráfico es un problema social muy grande, que va hilado con la corrupción: “es un problema grave de seguridad, que impacta a todos los municipios”.
José Luis Campos Huerta, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), delegación Gómez Palacio, afirma que actualmente el poder del narcotráfico es mayor en cuanto a poder económico y armamento, por lo que hoy en día se observan peleas internas por tener un mayor territorio en dónde realizar sus operaciones.
“Las bandas de delincuentes hacen lo que quieren y poco les importa las acciones que implemente la autoridad, por lo que no dudo que exista una relación directa con los cuerpos policiacos para tener protección y realizar sin mayor problema las operaciones”.
Para Roberto López Franco, director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Coahuila e integrante del Comité Estatal de Participación Ciudadana de la PGR, no hay ninguna duda que el poder del narcotráfico es realmente impresionante, “los operativos que los ‘narcos’ realizan en algunas partes del país dejan en evidencia que han rebasado a la mayor parte de las estructuras del Gobierno, el mejor ejemplo lo tenemos con “El Chapito”, con quien el Gobierno Federal ha dado tumbos, han demostrado que sólo se pasan la pelotita de un lado a otro y no saben qué harán con este personaje”.
El académico plantea que cada día que pasa la estructura es más refinada, pues han aprendido a inmiscuirse en ámbitos no sólo de lavado de dinero, sino también con actividades relacionadas con el manejo de impuestos.
“Seguramente también tiene que ver con una nueva generación de narcotraficantes ‘finos’, quienes tienen estudios de maestría y doctorado, realizan actividades de carácter legal y tienen esto como máscara para encubrir las operaciones de los ‘narcos’ reales. Creo que ha permeado de manera profunda a la sociedad”.
Esta opinión es compartida por el sociólogo, Lerins Varela Castro, quien explica cómo la estructura del “narco” poco a poco fue aceptada en la sociedad.
“Lo que pasa es que hemos visto a través de los tiempos cómo en un momento dado, basándonos en producción básica de la marihuana y amapola, fueron afectándose los estratos rurales y marginados, pero la población aceptó como tales estas actividades; quienes las realizan se han convertido en una parte importante de la estructura social porque apoyan la construcción de carreteras o la realización de múltiples obras; en estos casos nadie objeta que dichas obras se realicen con dinero proveniente de actividades ilícitas, la población misma lo permite porque recibe beneficios directos de ello, esto ha pasado en muchas partes del mundo”.
El secretario de Seguridad Pública en Durango, Juan Francisco Vázquez Novoa, va más allá al señalar que a él le queda muy claro que el narcotráfico es una de las empresas de mayor capacidad económica en todo el mundo.
“El maestro Peñalosa hablaba en el pasado Congreso de Prevención del Delito que se llevó a cabo en Chihuahua en el sentido de que el narcotráfico tiene a nivel mundial utilidades cercanas al orden de los 25 mil millones de dólares. Entonces, es obvio el gran poder económico que tienen, son delincuentes que han llegado al grado de contratar economistas, analistas de mercado, comunicadores, expertos en materia de armamento, expertos en materia de comunicaciones. A mí me queda muy claro que los narcotraficantes no tienen limitantes económicas para proveerse a sí mismos de los recursos humanos y materiales de alta tecnología, de alta capacidad para el logro de sus hechos ilícitos”.
Plan integral
Para el gobernador de Coahuila, Enrique Martínez y Martínez, ha sido una lucha cruenta lo que se ha visto en las últimas semanas.
“El hecho de que se hayan acumulado más de 500 ejecutados en lo que va del año es sumamente delicado, es sumamente grave. Qué bueno que están tomando acciones como este dispositivo que se hace en Nuevo Laredo y en algunos puntos de la frontera”.
Para el mandatario estatal es necesario que el plan de combate al narcotráfico sea integral, porque si solamente se atienden las ciudades que tienen problemas muy graves, los delincuentes se pueden ir a las otras ciudades.
“Necesitamos un plan integral, de inteligencia militar, de la Procuraduría General de la República, de manera que podamos blindar la zona, que no ataquemos en una localidad y que eso pueda hacer que los delincuentes corran a las otras”.
Las grandes empresas
Robert Stefanic Mery, presidente de Canacintra, delegación Torreón, expone que las actuales disputas territoriales de las bandas de narcotraficantes sí preocupan al sector empresarial, ya que era un escenario que sólo se veía en Estados Unidos anteriormente. La lucha por tener un mayor territorio en dónde vender las sustancias ha provocado que el Gobierno pase a un segundo término de importancia, situación que ha desencadenado un gran número de ajuste de cuentas.
El empresario Carlos Delgado López, presidente del Consejo de Participación Ciudadana de la PGR, opina que es un hecho irrefutable que los cárteles de la droga en México ya se han equipado con gente y tecnología de vanguardia sobre todo con armas y sistemas de radio-comunicación.
“Tienen gente preparada para verificar que todo marche bien como la grande empresa que es, que controle a policías, a académicos y a políticos, pues es bien sabido que este problema ha permeado a todos los niveles de la sociedad”.
Para el empresario son muchas las ciudades del país que han crecido como la clara manifestación del florecimiento de la delincuencia organizada.
“Las ciudades han crecido en sus actividades de comercio y servicios, como hoteles, agencias de ventas de automóviles, restaurantes. Hay mucho dinero de este tipo, hay mucho lavado de dinero”.
30 grandes organizaciones de narcotraficantes operan en el país.
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