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SANTIAGO DE CHILE.- La Corte Suprema de Chile rechazó ayer por unanimidad el recurso de amparo presentado por Lucía Hiriart, esposa del ex dictador Augusto Pinochet, y su hijo Marco Antonio, y ratificó su procesamiento por complicidad en fraude al fisco.
Tras una hora de alegatos de la defensa y la parte querellante, la Segunda Sala del máximo tribunal chileno, presidida por el juez Alberto Chaigneau, confirmó ayer el procesamiento dictado por el magistrado Sergio Muñoz, quien lleva la causa.
El fallo judicial de ayer representó un nuevo revés para la defensa de la familia Pinochet, ya que la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago también había rechazado la semana pasada el recurso de amparo presentado por los inculpados.
La esposa del ex gobernante de facto (1973-1990) y el hijo menor de la pareja fueron sometidos a proceso el pasado nueve de agosto por el juez Muñoz como cómplices del delito de fraude tributario que se le imputa a Pinochet, por sus cuentas secretas en el extranjero.
Hiriart alcanzó a permanecer un día detenida en el Hospital Militar de Santiago, hasta que la justicia le otorgó la libertad bajo fianza, mientras su hijo sigue bajo arresto en el anexo cárcel Capuchinos, en esta capital, donde lleva 14 días.
Mientras la esposa del ex dictador chileno recobró su libertad previo pago de una fianza de dos millones de pesos (tres mil 700 dólares), al hijo de Pinochet se le negó ese beneficio porque la justicia lo considera un “peligro para la sociedad”.
Muñoz procesó a la esposa e hijo del ex dictador por considerar que participaron en acciones para ocultar la fortuna de la familia, ya sea a través de la apertura de cuentas en el extranjero bajo nombres falsos o su participación en sociedades.
En las investigaciones judiciales, el magistrado estableció que peritajes grafológicos comprobaron que Hiriart firmó documentos que en sus declaraciones ante los tribunales negó conocer.
De acuerdo a las indagaciones, Pinochet y su familia habían ocultado en cuentas secretas en el extranjero 27 millones de dólares y en Chile evadieron impuestos por cinco mil millones de pesos (8.6 millones de dólares).
