El diálogo no se ha cerrado porque en cinco ministerios no se ha logrado acuerdo -entre ellos los de Defensa y Petróleo-, y se han designado solo "ministros en funciones".
Bagdad, (EFE).- El Parlamento iraquí aprobó hoy, jueves, el nuevo Gobierno presentado por el primer ministro, Ibrahim Al Yafari, en medio de la enésima oleada de violencia en todo el país.
Al menos una decena de personas perdieron la vida en atentados perpetrados en diferentes ciudades iraquíes en las doce horas previas a que la Cámara se reuniera para dar su voto de confianza al primer Ejecutivo iraquí salido de las urnas en casi medio siglo.
Sobre las 13.30 de la tarde hora local (9.30 GMT), un total de 180 de los 185 diputados presentes dieron el "sí" a mano alzada al gabinete de Al Yafari y pusieron así punto y aparte a los cerca de tres meses que ha durado la negociación.
El diálogo no se ha cerrado porque en cinco ministerios no se ha logrado acuerdo -entre ellos los cruciales de Defensa y Petróleo-, y se han designado solo "ministros en funciones".
A la sesión faltaron, no obstante, noventa de los 275 representantes que tiene la Cámara, cifra que representa más del 30 por ciento de la misma.
Entre los ausentes destacaba la figura del ex primer ministro, Iyad Allawi, quien anoche abandonó el país de manera inopinada, y la de la mayoría de los miembros de su grupo "la lista iraquí", que han quedado apartados del poder.
La asamblea comenzó con un breve debate sobre cómo se realizaría una votación y la lectura, por parte del presidente del Parlamento, Hashem al-Hasani, de los 36 nombres sugeridos por Al Yafari -32 ministros y cuatro viceprimer ministro.
"En la elección de los ministros, tuve en consideración la buena reputación y la eficiencia de los candidatos para trabajar en equipo. Este es el primer paso de una nueva política para reconstruir Irak", declaró Al Yafari.
El político iraquí propuso al controvertido Ahmad Chalabi, líder del partido del Congreso Nacional iraquí, como uno de los cuatro viceprimer ministro del Gobierno.
Otro será Rush Nuri Shawars, de origen kurdo, mientras que los dos restantes están aún a la espera de ser designados.
Para el Ministerio de Interior ha sido elegido Bayan Yabr, shii miembro de la Asamblea Suprema de la Revolución Islámica Iraquí (ASRII), uno de los principales grupos de la Alianza Unida Iraquí (AUI), coalición que posee la mayoría absoluta en el Parlamento.
Al frente del Ministerio de Asuntos Exteriores quedará Hoshyar Al Zibari, un kurdo que ya desempeñó este cargo en el Gobierno cesante del primer ministro saliente, Iyad Allawi.
El Ministerio de Finanzas será dirigido por Ali Abdel Amir Alaui, miembro asimismo de la AUI.
En la lista también aparecen seis mujeres y al menos cinco suníes.
Cinco de los ministerios, sin embargo, han sido atribuidos a ministros "en funciones" hasta que pueda lograrse un acuerdo sobre los nombres propuestos.
Unos de esas carteras es la de Petróleo, para la que Al Yafari ha sugerido el nombre del polémico Chalabi.
El Ministerio de Defensa ha quedado igualmente en suspenso, y podría ser controlado por el propio Al Yafari.
La histórica sesión tuvo lugar tras una nueva noche y madrugada sangrienta en Irak, escenario de atentados en Tikrit, Bagdad, Musayeb y Samarra.
A primera hora de la mañana, al menos dos personas murieron y dos resultaron heridas en una atentado suicida perpetrado en la ciudad de Tikrit, a unos 200 kilómetros al norte de Bagdad.
El kamikaze hizo estallar la carga al paso de un convoy militar conjunto integrado por soldados estadounidenses y guardias nacionales iraquíes, explicaron fuentes policiales.
El incidente, sin embargo, no ha sido confirmado ni desmentido aún por el mando militar de Estados Unidos en Irak.
En Bagdad, dos grupos de pistoleros asesinaron a tiros a un alto funcionario del Ministerio de Interior, y a un teniente coronel de la Guardia Nacional iraquí cuando se dirigían a su puesto de trabajo.
En la estación de autobuses de Musayeb, ciudad situada al sur de Bagdad, cuatro personas perdieron la vida y una veintena resultaron heridas en un ataque fallido de los insurgentes con cohetes Katiusha contra un acuartelamiento cercano de la Guardia Nacional iraquí.
Y en Samarra, al menos dos oficiales de policía murieron y cinco agentes resultaron heridos al explotar hoy, jueves, una bomba colocada en una motocicleta aparcada en esta ciudad iraquí ubicada en el denominado "triángulo suní", corazón de la insurgencia en Irak.