NUESTRA REALIDAD
Sociedad|Cuando se presentan indicios de problemas es necesario pedir ayuda
EL SIGLO DE TORREÓN
La intervención de los suegros impide que la pareja madure
TORREÓN, COAH.- En la relación de pareja, hay síntomas muy sutiles que anuncian una dificultad grave entre las personas, pero son tan ?silenciosos? que se tienden a ignorar hasta que, como una enfermedad, la problemática ya está muy avanzada, dice el psicólogo, Jesús Amaya Alcalá.
El especialista en terapia individual y de pareja explica que son tres los síntomas más frecuentes que anuncian un conflicto en la relación. El primero, cuando el matrimonio recién formado no puede desprenderse de su familia de origen, ya sea a nivel emocional o económico.
?Es esa pareja que no puede desprenderse de papá y mamá, tienen una relación de dependencia emocional o económica con la familia?, manifiesta, ?incluso los problemas que surgen en la relación no se tratan con la pareja sino con los papás y se llegan a consultar las decisiones con ellos sin tomar en cuenta a la otra persona?.
Refiere que esta relación puede parecer funcional y resulta aceptada por la sociedad, pero a largo plazo, la intervención de los suegros no permite que el matrimonio evolucione y la pareja no puede madurar, pues le resuelven todos los problemas.
Otro de los síntomas que menciona el psicólogo es cuando se utiliza a un hijo como ?muro de protección? y literalmente el padre o la madre lo ponen en medio de los dos. La función del menor será no permitir las agresiones, pero tampoco la comunicación fluida, pues incluso llega a ser el mediador.
?El niño duerme en la cama entre la pareja, o se le manda con recados para el papá o la mamá, entonces se utiliza al hijo para evitar la comunicación, cuando hay tantos conflictos que prefieren evitarlo?, comenta, ?hay casos de recién casados que no tienen hijos y van por el sobrinito, que cumple esta función?.
Amaya Alcalá señala como tercer síntoma cuando hay un niño problema, pues indica que un menor que tiene reportes de la escuela es reflejo de un padre problema. Los papás suelen llevar al pequeño al psicólogo, pero la terapia muchas veces requiere también incluir a los progenitores.
?El niño es el portador del síntoma, pero cuando reportan a un menor de violento, grosero, agresivo, o también si es retraído, esta conducta es consecuencia de lo que presencia en casa, hay una razón por la que es así?.
El especialista dice que las parejas suelen presentar indicios como éstos y no los tratan hasta que ya el matrimonio está desecho y hay muchas heridas que no sanan, pero cuando se han ofendido demasiado, no queda mucho qué hacer, pues ignoraron los síntomas.
Orientación
El psicólogo, Jesús Amaya Alcalá, explica que estos síntomas son indicadores de conflictos en la pareja y advierte que ante cualquier duda que se tenga de la relación, es necesario que acudan con un especialista que les pueda orientar.
-Si un matrimonio depende emocional o económicamente de su familia de origen, no puede madurar ni hay evolución en la relación de pareja.
-Cuando se pone a un hijo entre los dos, esto es indicador de un problema que la pareja no quiere enfrentar.
-Detrás de un niño problema, hay un papá o mamá problema.
FUENTE: Jesús Amaya, psicólogo
