NUESTRA REALIDAD
Familia|Una buena atención crea los cimientos para la vida
EL SIGLO DE TORREÓN
La presencia materna es vital durante los tres primeros años para que el infante se desarrolle
TORREÓN, COAH.- La presencia de mamá y papá, respectivamente, proporciona a los menores los cimientos de cómo se desempeñarán en la vida, con éxito o con fracaso, son las bases de la vida, dice la psicoterapeuta infantil, Lucía Cristina Puga.
“Si contamos con la atención de mamá y papá en la infancia, tendremos las armas que nos ayudarán a desenvolvernos en la vida”, comenta.
Explica que el desarrollo psicológico de los menores está dividido en etapas, que se deben tomar en cuenta para entender las necesidades de cada fase, desde el nacimiento a los tres años, de los tres a los seis, y de seis a once.
En la primera etapa, hasta los tres años, los infantes requieren, además de los cuidados básicos, la presencia de la madre, el niño necesita una atención constante de la progenitora, que representa su enlace con el mundo.
“El niño requiere la seguridad de que su mamá va a estar ahí, ya sea en un lugar de su casa o, si se le lleva prematuramente a un centro de atención, entonces tener la seguridad de que la va a encontrar al regresar en el mismo sitio”, manifiesta.
Lucía Puga señala que, cuando la madre sale constantemente y dedica poco tiempo al menor, éste siente que pierde el contacto con el mundo. La presencia materna es vital durante los primeros tres años para que el infante se pueda desarrollar adecuadamente, conforme va creciendo, la presencia va decreciendo.
“Cuando tiene tres años, el menor ya tiene la seguridad de que mamá va a regresar y puede separarse de ella con esta certeza”, indica, “la exploración del mundo a través de ese contacto con su madre baja”.
En la segunda etapa psicológica, es el padre quien debe poner toda su atención en el menor, sin importar que sea varón o niña, es importante que el papá encuentre tiempo para jugar aun cuando trabaje la mayor parte del día.
“Los niños necesitan que se les dedique tiempo porque aprenden cómo es el padre a través del trato con ellos y esto les influye, si papá es amable con los demás, así se van a comportar, pero si es agresivo, entonces lo van a seguir”, comenta, “si papá les enseña a ser educados con su madre y sus abuelos, el niño lo va a tomar automáticamente de cómo se lo va mostrando su papá, por eso es fundamental la atención del padre”.
La psicoterapeuta explica que, en la etapa en que ya cursa primaria, el menor cuenta con las bases de la certeza de que merece ser feliz, tiene las armas para salir adelante y las bases para sus relaciones sociales.
“La presencia de los padres en las primeras etapas de la vida de los niños son de una importancia vital, porque establecen los cimientos de cómo se van a desempeñar en la vida, son las bases para lo que van a hacer”, agrega.
Para tomar en cuenta
Lucía Cristina Puga, psicoterapeuta infantil, explica que es necesario que los padres de familia entiendan la importancia que tienen para el buen desarrollo de los niños, sobre todo en las primeras etapas de su vida.
-Posteriormente, los progenitores no deben perder el contacto con los menores, pero éste disminuye por la independencia que van adquiriendo.
-En el caso del papá, debe comprender que el cuidado de los hijos no está únicamente en la madre, sino en ambos, para que el menor tenga un sano desarrollo.
-Los padres pueden buscar asesoría con personas especializadas en el tema para conocer más sobre los cuidados que requieren los infantes.
FUENTE: Lucía Cristina Puga, psicoterapeuta infantil
