Despejan manifestantes la autopista en El Alto y la capital boliviana.
EFE
LA PAZ, BOLIVIA.- La provisión de combustible en la ciudad de La Paz, sede del gobierno de Bolivia, se restableció ayer tras suspenderse parcialmente las protestas antigubernamentales en la ciudad aledaña de El Alto, que mantenía incomunicada a esta capital.
Desde la planta de Senkata, propiedad de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), los primeros camiones con bombonas de gas licuado de petróleo salieron a las 09:30 horas (13:30 GMT) rumbo a los barrios tanto de La Paz como de El Alto.
Al mismo tiempo, la Policía informó que la autopista entre ambas ciudades está despejada tras varias semanas cortes.
La directiva de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto, la organización más radical en las protestas por la convocatoria a la Asamblea Constituyente, decidió facilitar la distribución de carburantes.
La entrega de gas licuado se inició dos horas antes de la entrevista entre el nuevo presidente del país, Eduardo Rodríguez, y los líderes de la Fejuve, para discutir los planteamientos de esta agrupación.
La cita, sin embargo, no ha sido aún confirmada por los sindicalistas, según fuentes del Palacio de Gobierno de La Paz.
Las autoridades han anunciado que el abastecimiento de combustible continuará con la entrega de gasolina para los miles de vehículos que hacen fila en las estaciones de servicio.