Asegura el jefe de Gobierno del DF estar a favor de acudir a foros internacionales cuando se violan derechos humanos pero desechó que el proceso que se le sigue se resuelva por intermediación de otro país.
México, (SUN-AEE).-Andrés Manuel López Obrador se pronunció en contra de que el tema del desafuero se resuelva por intermediación de algún otro país.
Sostuvo que ese tema "es un asunto que tienen que resolverse en México, pues somos un país independiente, soberano y los asuntos internos se tienen que resolver en este ámbito".
No obstante aclaró que está a favor de acudir a foros internacionales cuando se violan derechos humanos y se cancelan los derechos políticos.
La anotación del jefe de Gobierno de la ciudad de México surgió a propósito de una información aparecida en el diario estadounidense New York Times, donde se señala que académicos estadounidenses pidieron a la secretaria de Estado norteamericano Condolezza Rice, que en su próximo encuentro con Vicente Fox, le haga saber que el desafuero podría ser negativo para la democracia en México.
Consultado sobre este tema, el jefe de Gobierno indicó que el desafuero es un asunto que llama mucho la atención tanto en México como en otros países, "porque se está tratando de inaugurar una nueva vía para eliminar a un adversario, se está buscando acreditar con la utilización facciosa de las instituciones y retorciendo la ley, el eliminar a un adversario...".
Por otro lado, Andrés Manuel López Obrador rechazo que el petróleo mexicano deba ser privatizado, como lo pretenden hacer con la reforma energética, los diputados del PRI y del PAN.
El funcionario señaló que todo indica que hubo un acuerdo entre el PRI y el PAN para negociar esta reforma.
El petróleo, dijo es el mejor negocio del mundo, producir un barril de petróleo cuesta tres dólares y se esta vendiendo en 38 dólares.
En ese sentido recordó que de acuerdo con la Constitución el petróleo es un negocio de todos los mexicanos y "no puede convertirse en un negocio de particulares".
Desde su perspectiva existe una forma de financiar la modernización del sector energético sin privatizarlo, mediante la canalización de mayor inversión a este rubro, en lugar de utilizarla para el pago de intereses del Fobaproa y el gasto corriente del gobierno federal.
López Obrador afirmó que los recursos de Pemex se envían íntegramente a la Secretaría de Hacienda para que ésta a su vez los ponga en manos de los banqueros al pagar los intereses del Fobaproa, o de los burócratas, que en el gobierno de Fox cobran sueldos muy altos.
Baste decir, aclaró, que el gasto corriente del Gobierno federal a crecido 50% en esta administración; "con una disminución del gasto corriente, con un plan de austeridad, bajando los sueldos de los altos funcionarios públicos y los gastos excesivos del gobierno federal se podrían liberar recursos para financiar a Pemex".
