EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Repudio total causó entre comerciantes y público en general, el anuncio de que se repartirá casi un millón de pesos entre todos los miembros del cabildo y algunos funcionarios como bono de marcha, puesto que la gestión de la administración encabezada por José Luis Marrufo Álvarez, ha sido calificada, en escala de uno al diez, con un seis.
Mejor que ese dinero se aplique en obras de beneficio común, pues existen numerosas deficiencias en los servicios públicos, expresó José Luis Macías Arellano, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Delegación Francisco I. Madero.
?El rechazo al bono de marcha ha sido desde siempre, pues nuestro Municipio tiene ingresos muy pobres y con obras muy limitadas, como para andarlos despilfarrando en compensaciones a personas que ni siquiera se las han ganado?, aseveró el representante del comercio organizado.
Parte de los 975 mil pesos que contemplan el mencionado bono, bien pudieron emplearse en la segunda aportación de 400 mil pesos para la conclusión del rastro municipal, por ejemplo, dijo Macías Arellano.
Son múltiples las carencias que se observan tanto en el medio rural como en el urbano, como es el caso de varios ejidos que como Lequeitio, no tienen red de drenaje al igual que en Florida, y eso que en el primer poblado nació el alcalde, señaló.
Falta agua, pavimento, alumbrado público, trabajos de bacheo entre muchos más a lo largo y ancho de toda la ciudad, dijo Héctor Arenas Quintana, comerciante local, quien también se manifestó en contra de la entrega del llamado bono de marcha.
?No es justo que mientras la ciudadanía padece de los servicios públicos más esenciales, los integrantes del Cabildo quieran irse a sus casas con un dinero que no se han ganado con su trabajo?, subrayó.
Rosaura Ibáñez, madre de familia, también criticó lo que llamó una ?comodina? actitud del alcalde, regidores y síndicos, de llevarse un dinero que debieron emplearlo en la realización de obras que sean de utilidad y beneficio para la comunidad.
No es justo que por cumplir con su obligación como servidores públicos a lo que se comprometieron al resultar electos por la ciudadanía, quieran llevarse ?todo el pastel, sin antes haberlo repartido entre quienes más lo necesitamos?, dijo la molesta mujer.
Todos coincidieron en que esto resulta una descarada burla para la población que ha calificado la gestión de Marrufo Álvarez, en una escala del cero al diez, con un simple seis.
Carencias
Entre las privaciones que sufren los maderenses, se encuentran:
*Agua potable.
*Falta de pavimento.
*Alumbrado público.
*Red de drenaje.
*Gasolina para las patrullas.
*Uniformes para los policías, entre otras.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
