Se niega Fox a aceptar juicios sobre la política para hacer frente a la violencia en la frontera; descarta que esta problemática refleje la situación del país.
MÉXICO, D.F., (SUN-AEE).- El gobierno del presidente Vicente Fox respondió al embajador de Estados Unidos, Tony Garza, sobre la situación en la frontera compartida con México y aseguró: "No admito juicio ni calificativo de ningún gobierno extranjero sobre las acciones de política que llevamos a cabo para hacer frente a los problemas".
Señaló que si bien comparte la preocupación del gobierno estadounidense por la violencia que se ha desatado en el Norte de México, "de ninguna manera refleja el estado de la situación en el país", y que existe una estrategia conjunta entre las
autoridades federales y locales que permite ofrecer a la ciudadanía buenos resultados en cuanto a la detención de miembros de los cárteles del narcotráfico y de bandas de secuestradores.
En un comunicado emitido por la Presidencia de la República, el gobierno del presidente Fox afirmó que el combate al narcotráfico requiere de la corresponsabilidad de la administración de George W. Bush para atender este problema.
"En todo lo que acontece en nuestra frontera, México y Estados Unidos compartimos tanto aciertos como errores", señala el documento de cinco puntos.
México, subraya el texto, lamenta el signo de alarma que puede llegar a desatar la advertencia a la ciudadanía estadounidense con respecto a la inseguridad en nuestras fronteras.
"Enfrentar temas como el narcotráfico y el lavado de dinero, atacar la oferta al mismo tiempo que la demanda, poner un freno a la violencia fronteriza, entre otros, requieren de una labor de cooperación basada en el reconocimiento de las fortalezas de cada una de nuestras naciones", sostuvo el gobierno mexicano.