La Secretaría de Gobernación negó ayer que haya ejercido presión alguna sobre la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) para que el jueves emitiera un segundo boletín que matiza la posición de la Comisión Episcopal Pastoral Social sobre el desafuero de Andrés Manuel López Obrador.
“La Secretaría de Gobernación y el Gobierno de la República en ningún momento han ejercido, ni ejercerán, ni pretenden ejercer, presión alguna sobre cualquier iglesia de México”, dijo Armando Salinas, subsecretario de Asuntos Religiosos.
El funcionario también reconoció que efectivamente habló telefónicamente con la CEM.
“Sí, yo hablé con el presidente el Presidente del Episcopado Mexicano y dije bueno cuál es la posición porque hay un boletín de la Secretaría General del Episcopado que no viene firmado”.
Agregó que en la plática simplemente pidió que se clarificara cuál era la posición del Episcopado.
Ayer se dio a conocer que la CEM emitió un primer comunicado para precisar que era autónoma la posición de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, sin embargo, ante la presión de Gobernación, se vio obligada a emitir otro que añadía un párrafo a la posición acerca del desafuero.
Enviado a la 21:12 horas, el segundo texto tenía la firma de José Guadalupe Martín Rábago, presidente de la CEM y añadía un párrafo en el que llamaba a la concordia a todos los actores políticos.