EL SIGLO DE TORREÓN
MATAMOROS, COAH.- Inconformes por la apertura reciente de una cantidad de expendios que considera exagerada en la zona centro, integrantes de la Unión de Comerciantes en Vinos y Licores y vecinos de la avenida Carranza y calle González cerraron de manera simbólica un nuevo establecimiento.
Ayer al mediodía, el grupo de personas se presentó en el minisúper que se localiza en el número 213 bis de la avenida Carranza, entre las calles González y Ortega y el que en su interior sólo cuenta con hieleras y cerveza, en cuyas paredes dejaron marcada con pintura en aerosol la frase ?rechazo total?, además de que cerraron la puerta como una forma simbólica de manifestar su rechazo contra la apertura de este tipo de negocios.
El presidente de la Unión de Comerciantes en Vinos y Licores de Matamoros, Américo Reyes García, manifestó que la inconformidad es porque el Municipio recién autorizó 27 licencias de funcionamiento nuevas para la venta de bebidas alcohólicas, sin tomar en cuenta a la agrupación que según dijo, representa a quienes han desempeñado esta actividad durante varias décadas.
Todas estas licencias, dijo, quedaron en manos de regidores y otros servidores públicos de la Administración que está por concluir funciones, mismas que serán puestas en operación en lo que resta del mes para no tener problemas con las nuevas autoridades.
A este respecto, denunció que regidores como María del Rosario Martínez, resultaron beneficiados con el otorgamiento de dichas concesiones por parte del alcalde, Felipe Medina Cervantes, por lo que incluso debería realizarse una investigación de las condiciones en que éstas fueron autorizadas.
Señaló que el problema también radica en que estos nuevos establecimientos, no han respetado la distancia mínima que debe existir entre uno y otro, que es de unos 100 metros, lo que ha generado una competencia desleal a quienes llevan años viviendo de esta actividad, pues además han disminuido los precios de los productos para atraer una mayor clientela.
Tampoco han hecho valer el Reglamento de Alcoholes en el sentido de no colocarse a menos de 150 metros de escuelas u hospitales, y para muestra señalaron que a una corta distancia de dicho negocio se ubica la escuela primaria Apolonio M. Avilés.
Otro caso es el del expendio que ayer mismo abrió en la avenida Cinco de Mayo, entre las calles Guillermo Prieto y Jesús González Ortega, del que la escuela primaria José María Morelos se ubica a menos de 50 metros de distancia, al que también acudirían para hacer una especie de clausura simbólica.
Reyes García dijo que los comerciantes no están en contra de que se abra este tipo de negocios, pero consideró que deben reubicarse a la periferia, pues están afectando seriamente a los ya establecidos y sobre todo, contribuirán a demeritar las condiciones del centro de Matamoros.
?Sabemos que podemos tener represalias de la autoridad municipal con estas acciones, pero no podemos permitir que siga habiendo tanto desorden, queremos que se revise el padrón y que estos negocios se reubiquen?, según expresó.
Juan Valles Arenas, quien en ese momento se encontraba en el interior del negocio de la avenida Carranza negó que éste sea propiedad de la regidora Rosario Martínez, y aseguró que había obtenido el permiso desde hace tres semanas, pero no había tenido la oportunidad ni los recursos para ponerlo a trabajar.
Dijo que por esta misma razón no se exhibían mercancías en el interior.
Cuestionamiento
Vecinas de la calle González cuestionaron la apertura de negocios dedicados a la
venta de bebidas alcohólicas, los que según dijeron no son tan necesarios como las fuentes de empleo para mejorar las condiciones de sus familias.
Angelina Castillo y Laura Nieto, dijeron estar inconformes por la autorización de nuevos expendios cuando ya existen demasiados en la zona centro de Matamoros, sólo por atender intereses de tipo político que desde luego, están muy alejados de las necesidades de la población.
?Porqué no permitieron la instalación de una empresa de refrescos en la zona industrial, ésta sí iba a generar fuentes de trabajo para nuestros hijos y esposos?, dijo una de ellas mientras participaba en el cierre simbólico de un expendio de la avenida Carranza.
Consideraron inadmisible que muchos de estos negocios ni siquiera respeten la presencia de escuelas u hospitales para promover el vicio y dar un mal ejemplo a la niñez y juventud, cuando deberían promoverse otras actitudes y valores.
