Unidades de pasajeros causan severos daños al pavimento y son vetados por colonos
En los fraccionamientos Jardines de Durango y Fidel Velázquez, así como en otros núcleos habitacionales del sur de la ciudad, los vecinos se oponen a la presencia de las rutas de transporte urbano, con el argumento de que las calles son de los colonos y que las unidades del servicio público dañan el pavimento.
Lo anterior lo denunció Javier Covarrubias Vázquez, dirigente del Sindicato de Choferes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), quien reclamó a las autoridades atención a esta problemática, situación que dificulta a los transportistas la cobertura de sus itinerarios.
?Ellos deben entender que son calles primarias que sirven para el servicio del transporte público, el cual tiene que entrar porque, de otro modo, hay gentes que no reciben el servicio por el capricho de otras que no lo necesitan tal vez?, puntualizó en su inconformidad Covarrubias Vázquez.
El líder choferil cetemista, en el marco de la asamblea mensual ordinaria de la Federación de Estado CTM, declaró a este diario que las trabajadores del transporte urbano se enfrentan a diversas problemáticas en las mismas colonias que son cubiertas por esta organización sindical.
?Hay muchos lugares en donde se nos complica entrar porque hay calles en muy malas condiciones, y hay otras zonas donde la gente no nos quiere permitir el acceso que porque les estamos dañando el estado de las calles?, dijo.
?... Hemos tenido problemas en Jardines de Durango, en el fraccionamiento Fidel Velázquez también. Y en el sur de la ciudad, con aquel lema de que ?esta calle es mía?, la gente no deja circular unidades del servicio público?, agregó inconforme.
Al respecto, hizo la acotación de que el programa de adoptar una calle, implementado hace años por las autoridades municipales, consistía en hacer conciencia a la gente de la necesidad de reparar y dar oportuno servicio a las deficiencias del pavimento.
Esa situación, dijo Javier Covarrubias, provoca conflicto a las rutas. Y en ese sentido dio a conocer que otro motivo de malestar para el gremio es el hecho de que sigan registrándose nuevos fraccionamientos o colonias irregulares sin accesibilidad vial suficiente.
Consideró finalmente que la falta de planeación de accesos en diversos asentamientos humanos es una realidad en la ciudad de Durango, situación que se derivó de la falta de planeación y de supervisión de la infraestructura básica necesaria con que debieron contar estas colonias para conectarlas a la red vial de la ciudad.
IMPUESTOS
Incumplimiento de pocos
Solamente 45 de los mil 300 taxis afiliados al Sindicato de la CTM en la ciudad de Durango no han pagado los impuestos vehiculares del 2004, mientras en el medio rural el incumplimiento fiscal de los transportistas de esta agrupación sindical es del 60 por ciento, de un total de mil 900 unidades de servicio público en todas sus modalidades.
Javier Covarrubias Vázquez, dirigente choferil de la CTM en el estado, expuso que los impuestos vehiculares del 2005 los han cubierto solamente unos cuantos agremiados, ya que la mayoría realiza sus pagos cuando está por terminar la etapa de descuentos (en marzo), y el resto conforme va pudiendo en el transcurso del año.
El entrevistado concluyó que en el medio rural el problema de evasión se acentúa, ya que hay retrasos de años que no han sido reportados a las autoridades de Recaudación de Rentas, lo cual, dijo, se debe a la situación económica tan difícil del interior del estado.