Agencias
CANNES, FRANCIA.- El cineasta austriaco Michael Haneke se llevó ayer el más convincente de los pocos y tímidos aplausos escuchados hasta ahora en Cannes por el drama Caché que protagonizan Juliette Binoche y Daniel Auteuil.
La vida de Auteuil, un periodista de televisión, transcurre con normalidad. Todo marcha sin problemas con su esposa (Juliette Binoche) y su hijo adolescente hasta que comienza a recibir unas misteriosas cintas de video de alguien que lo observa. Pese a todo se resiste a acudir a la policía porque cree saber que es alguien de su pasado, alguien de quien le cuesta hablar y a quien ya había decidido enterrar entre otros recuerdos.
De niño convivió con un muchacho argelino cuyos padres desaparecieron al parecer en una matanza en París en 1961, cuando murieron 200 argelinos en una manifestación.
Aunque se aborda la cuestión colonial francesa, Haneke explicó en rueda de prensa en el Festival de Cannes que ése era un tema secundario, que lo importante en la película era la culpa y cómo el ser humano la procesa.
"En todos los países hay cosas de las que no se quiere hablar y eso es peligroso", precisó el realizador nacido en Alemania (Munich, 1942).
Distinguido con el Gran Premio del jurado por La Pianista hace cuatro años, Haneke no aporta demasiadas claves para comprender realmente lo que está ocurriendo. Recurre a esta técnica para mantener la tensión durante el metraje, pero también para hacer reaccionar al espectador.
"Cuando trabajo intento que el espectador se haga preguntas, explicó el cineasta. Todo el trabajo que hago es para dar diferentes posibilidades (al público). Otras películas te dan la respuesta antes de que ni siquiera te plantees nada. Las películas que me suscitan preguntas son las que recuerdo, el resto las olvido. Intento hacer lo mismo con la audiencia".
Auteil, por su parte, comentó que en su caso, cuando trabaja justo evita planteamientos, él sólo quiere un director que le diga por dónde tiene que entrar o salir del set.
En Funny Games, La Pianista, Código Desconocido o Le Temps du Loup, Haneke aborda temas de una forma incisiva, agresiva. Caché, sin embargo, es una película que no contiene la dureza de los anteriores trabajos.
Juliette Binoche, que ya visitó Cannes con el mismo director (Código Desconocido), señaló que Haneke trata temas difíciles que cuestionan nuestra vida cotidiana. "Son películas que recibes como una ducha fría pero son necesarias. No son películas que mirarías todos los días pero sí de vez en cuando", agregó.
La actriz, distinguida en los festivales de Berlín (El Paciente Inglés) y Venecia (Azul), pero no en el certamen francés, elogió además la forma de dirigir del cineasta austriaco. "Es preciso, te da la libertad necesaria, porque sin libertad no puedes trabajar. Sus precisiones se acercan a la música. Así es como dirige, como si compusiera", señaló.
NOTA REL
Chinos al rescate
Aparte de la película de Haneke, se proyectó en la sección oficial del Festival de Cannes la primera cinta china a concurso: Election, de Johnnie To.
El cineasta de Hong Kong fija su cámara en la China actual, donde las tradiciones centenarias persisten pese a los avances tecnológicos y se centra en la Triad, una sociedad secreta que existe desde hace siglos en Hong Kong y que nació entre unos monjes que se opusieron al poder imperial.
Cuenta con un lenguaje secreto, leyes internas y numerosos afiliados pero en la actualidad actúa como una organización criminal, es decir, como una mafia. Election se centra en el momento en que cada uno de las familias debe votar para elegir al que será el "padrino" durante los próximos dos años.
To, con la ayuda de reconocidos actores de la antigua colonia británica como Simon Yam y Tony Leung Ka-fai, traza un retrato realista del Hong Kong actual.
La cinta no contiene policías o malhechores heroicos, sino seres humanos atrapados en un violenta lucha por el poder. A través de los dos candidatos a "capo", el realizador muestra cómo la tradición se va desintegrando dejando paso a la ambición individual. "Vivimos en otra época. Ahora los negocios lo son todo. Ahora los gángsters tienen que utilizar el cerebro", afirma uno de los aspirantes a "capo" en el filme.
Mientras el certamen desarrolla su cuarta jornada, todo está listo ya para el gran acontecimiento de hoy: El estreno mundial del último episodio de la Guerra de las Galaxias, Episodio III: La Venganza de los Sith, dirigida por George Lucas, quien estará acompañada por los integrantes del reparto como Natalie Portman.
A pesar de la persistente lluvia que se abatía sobre la ciudad francesa, numerosos fans de la saga galáctica seguían esperando poder ver en algún momento a sus héroes del celuloide.
