El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- En una emotiva ceremonia fue recordado ayer el matador de toros Valente Arellano Salum. Aficionados, familiares y amigos del diestro lagunero acudieron puntuales a la cita de cada año en el monumento erigido en su honor frente a la Plaza de Toros Torreón.
El homenaje fue organizado en ocasión del 21 aniversario de su fallecimiento por el grupo Los Toros: Arte y Cultura, y dio inicio a las 20:00 horas, en el acto estuvieron presentes Valente Arellano Flores y Sonia Salum Chávez, padres del malogrado torero.
Raúl Héctor Avendaño se encargó de hacer una remembranza de quien en vida fuera un notable matador de toros, con un futuro promisorio, que sólo un fatal accidente pudo truncar.
En su intervención, Raúl Héctor Avendaño recordó el mensaje pronunciado el cuatro de agosto de 1996 por Guillermo V. Zamudio ante el monumento a Valente Arellano Salum, del cual destacó lo siguiente:
?Hoy, este día, Valente, aquí estamos contigo; porque el recuerdo de tu brillante pasado siempre será presencia en la fiesta de los toros... En todo momento y en todas partes, lo mismo en las humildes arenas de los cosos pueblerinos que en los ruedos fastuosos de las grandes plazas, siempre estará ahí...?.
Los asistentes al acto colocaron una ofrenda floral y montaron una guardia de honor, el homenaje concluyó a las 20:10 horas, ya que en ese momento empezó a llover.
Valente Arellano Flores agradeció la presencia de los asistentes al acto, y al término del mismo recordó que la mejor tarde de Valente junior fue la de su alternativa, el tres de junio de 1984 en Monterrey.
?Lamentablemente no pudo tomar la confirmación, sin embargo, es considerado como una de las grandes figuras del toreo lagunero, hasta el momento no ha surgido otro igual, aunque Arturo Gilio fue un gran torero?, reconoció Valente Arellano Flores.
Por su parte, Sonia Salum Chávez citó de manera textual: ?Dicen que los que se van se quedan entre nosotros para que se acuerden de ellos, el nombre de Valente sigue entre la gente, los medios de información y en el seno familiar lo recordamos de manera constante.
?Como ser humano, lo que puedo decir es que Valente fue un sol y todavía nos alumbra, el mundo perdió un torero, pero yo perdí a un hijo?, concluyó Sonia Salum Chávez.
