Declaro sin ambages, con plena convicción, la personal satisfacción que tengo al formar parte de la Universidad Autónoma de la Laguna, como modesto facilitador académico en su Colegio de Humanidades y más específicamente en su Facultad de Derecho. Desde hace algunos años estoy a cargo de los cursos de Introducción al Estudio del Derecho, Derecho Constitucional I y II y Seminario sobre Control Constitucional. Me esfuerzo por cumplir esta tarea.
Resulta oportuno destacar en esta colaboración editorialista, agradeciendo el espacio que gentilmente nos proporciona este prestigiado Diario, que la institución de estudios superiores donde presto mis servicios tiene perfectamente clarificado su compromiso social y ético con todos los sectores de la comarca lagunera y que su aspiración a la excelencia académica encuentra sustento y proyección en el contenido de su filosofía y en la materialización de su misión humanista formadora de hombres y mujeres de bien, ciudadanos todos al servicio de su comunidad.
En el quehacer incesante de la universidad para proporcionar a los jóvenes en su carácter de participantes académicos, los instrumentos y herramientas que les permitan de mejor manera acceder al análisis y reflexión de la ciencia, con una visión globalizadora del mundo y de la vida, se aprovechan recursos y se incorporan técnicas de aprendizaje como resultado de convenios y de vinculación con instituciones y entidades de carácter nacional dedicadas a la investigación y a la difusión del conocimiento.
Un tipo de estas nuevas técnicas es la videoconferencia. Recurso didáctico escasamente utilizado, es verdad, pero de un valor académico incuestionable, la videoconferencia elimina los obstáculos que la distancia y el tiempo oponen a la celebración y transmisión de eventos de alta calidad que en otras circunstancias sería difícil acceder a ellos.
Así, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, se llevó a cabo el pasado 17 de febrero un seminario que tuvo como tema central la Constitución Europea. A través de la videoconferencia, alumnos y profesores de la carrera de Derecho, tuvieron oportunidad de escuchar y ver, gracias a la magia del Internet, a los expositores de los diferentes módulos que el asunto incluía y quienes en ese preciso momento hacían su presentación en el Aula de Seminarios “Doctor Guillermo F. Margadant”, en la Ciudad Universitaria del Distrito Federal.
El tema es importante. Aunque aparentemente ningún interés pudiera tener para los estudiantes mexicanos y específicamente para los laguneros, conocer el proceso de creación de la Constitución de Europa, cuyo contenido está siendo sometido a consideración de los países miembros para su ratificación o rechazo (España la ratificó el domingo 20 de febrero), lo cierto es que sí interesa a nuestro país por los acuerdos económicos que México tiene con la Unión Europea.
El seminario recibido en la modalidad de videoconferencia se estructuró en cuatro subtemas: La historia de la Unión Europea: desde la Comunidad Europea hasta la Constitución de Europa; Las Instituciones de la Unión de la Constitución Europea: La Garantía de los Derechos Fundamentales en Europa, después de la Constitución y las Competencias de la Unión Europea y las Relaciones con los Estados Miembro. Sus ponentes fueron en el orden respectivo, Francesca Rescigno de la Universidad de Forli-Bolonia; Marco Olivetti, de la Universidad de Foggia; Tania Groppi y Laura Ammannati, ambas de la Universidad de Siena. Todos italianos. Pura calidad.
El evento tuvo una duración de más de cuatro horas y en todo momento los participantes que asistieron al mismo mantuvieron una actitud interesada y expectante ante este novedoso fenómeno jurídico político, igualmente digno de ser conocido.
Qué bueno que las universidades todas promuevan la aplicación y el aprovechamiento de este tipo de recursos e incorporen en sus herramientas de trabajo académico el empleo de técnicas como la que aquí comentamos. Por lo pronto felicitación y reconocimiento a la Universidad Autónoma de la Laguna.
r_muñozdeleon@.com.mx