Los médicos también se mueren.
Los necios hacen la fiesta, y los listos la celebran.
Los niños y los locos, dicen las verdades.
Los niños, ni ocultan mentiras, ni callan verdades.
Los ojos lo curiosean, y el corazón lo desea.
Los pecados son de los hombres, no las instituciones.
Los pobres tienen más coplas que ollas, y más refranes que panes.