Quien lee y escribe no pide pan.
Quien lejos va a casar o va engañado, o va a engañar.
Quien mal anda, mal acaba.
Quien miente, pronto se arrepiente.
Quien mucho da mucho recibe.
Quien no ahorra la cerilla cuando puede, no tiene una peseta cuando quiere.
Quien no comprende una mirada, tampoco comprenderá una larga explicación.