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PUEBLA, PUEBLA.- Su acervo es muy valioso; sin embargo, durante más de siglo y medio la Biblioteca Palafoxiana estuvo inerte y era visitada como un museo.
Por ser el único testimonio vivo en su género de la época novohispana, en los últimos años se sometió a un proceso de rescate y proyección para revalorarlo.
Así se expresó Joel Peña, subdirector de investigación de este espacio, ubicado en el Centro Histórico de Puebla y que se ha convertido en un referente cultural no sólo del Estado, sino a nivel nacional e internacional.
Recientemente fue creado el Fondo Hugo Leicht, que busca consolidar a la Biblioteca Palafoxiana como un verdadero centro de investigación, ya que en el pasado era visto sólo como un inmueble para la formación del clero, o como un lugar turístico donde acudían visitantes no para consultar los archivos, sino para contemplar la belleza de ese recinto antiguo; en cuanto a la afluencia de especialistas, era mínima.
?Debido a su acervo, la investigación era casi nula, ya que el grueso de su colección está vinculada con las ciencias eclesiásticas, como la filosofía o el derecho canónico. Además, la mayoría de los documentos está escrito en latín. Así que era necesario explotar más las cualidades de la biblioteca?, comenta Joel Peña.
A través del fondo, se pretende recabar documentación que enriquezca el acervo de la Biblioteca Palafoxiana, como ocurrió hace poco con la fundación española MAPFRE Tavera, que donó su colección digital Clásicos Tavera, uno de los principales bancos de imágenes de obras de gran trascendencia histórica para la cultura iberoamericana. Hasta la fecha, se han adquirido 75 discos compactos (que guardan alrededor de 300 libros), 43 volúmenes sobre bibliotecología y 28 inventarios de archivo.
Hasta el momento, el fondo no ha solicitado estímulos económicos a dependencias institucionales o privadas; sin embargo, no se descarta la posibilidad de que haya interés de las autoridades por impulsar este proyecto.
El nombre que lleva esta iniciativa es para rendir homenaje a un insigne bibliotecario: el historiador Hugo Leicht Meyer, quien en la década de los 30 elaboró uno de los catálogos que durante decenios fue el único medio para poder conocer el contenido de la biblioteca.
La expectativa -asegura Joel Peña- es que la Biblioteca Palafoxiana siga apoyando la investigación científica y que haya mayor vinculación con la sociedad, a través de talleres y exposiciones que los acerquen a este espacio.
El rescate integral del inmueble comenzó en 1999, a raíz de los daños que sufrió por el sismo de ese año. Este fenómeno natural fue un detonador para que los poblanos miraran nuevamente este tesoro cultural poblano.
Cuatro fueron las fases del proyecto de rescate: consolidación del inmueble, restauración y reestructuración de la estantería de tres niveles que data del siglo XVIII, catalogación y clasificación del acervo bibliográfico, así como la difusión y preservación del recinto.
La biblioteca está abierta de martes a domingo, de 10:00 a 17:00 horas. El costo es de diez pesos admisión general y cinco pesos para estudiantes, maestros y gente de la tercera edad. Para mayores informes, visitar la página: www.bpm.gob.mx, o acudir al recinto ubicado en Cinco Oriente No. Cinco, Centro Histórico de Puebla (a un costado de la Catedral).
Histórico recinto
La Biblioteca Palafoxiana nació con la donación de cinco mil libros que hiciera el entonces obispo de Puebla, Juan de Palafox y Mendoza.
-Este acervo fue en aumento con las numerosos donaciones que hicieron otras autoridades eclesiásticas.
-Es un inmueble que se construyó en 1773 en el Colegio de San Juan, actualmente Casa de Cultura de Puebla.
-Alberga un acervo de 42 mil 556 libros y cinco mil 345 manuscritos, de autores de la antigüedad, la Edad Media, el Pensamiento Ilustrado y científico del siglo XVIII y de finales del siglo XIX.
-Aunque es un material especializado, Joel Peña aclara que la biblioteca está abierta a todo público, ya que hay textos con una gran variedad de temas que pueden resultar interesantes, debido a que la preparación de los sacerdotes era integral.
FUENTE: Agencias