Admite culpabilidad al romper reglas de ética en experimentos.
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SEÚL, COREA DEL SUR.- El surcoreano Hwang Woo-suk, director de la Fundación Mundial de Células Madre, anunció ayer su dimisión al cargo tras admitir haber utilizado para sus experimentos los óvulos de dos de sus colaboradoras.
Hwang realizó el anuncio de su renuncia en una conferencia de prensa llevada a cabo en el auditorio principal de la Universidad Nacional de Seúl, donde admitió su culpabilidad de romper las reglas éticas, señaló la agencia de noticias Yonhap de Corea del Sur.
El científico pidió disculpas tras darse a conocer las ?trágicas y embarazosas? noticias en las que se reveló que Hwang utilizó para su investigación en células madre los óvulos de dos jóvenes pertenecientes a su equipo.
?Centrado como estaba en los esfuerzos científicos, tal vez no he visto los aspectos éticos relacionados con mi trabajo?, reconoció Hwang, uno de los más importantes impulsores de la investigación sobre clonación.
La utilización de personas con algún grado de dependencia está considerada ?una violación de la ética médica? en varios países.
Hwang confirmó que por el momento seguirá con sus investigaciones en la Universidad de Seúl, ?para devolver el apoyo recibido y por todos aquellos con enfermedades incurables como el cáncer?. La polémica surgió después de una entrevista que una de las investigadoras concedió en mayo de 2004 a la revista científica Nature, en la que reconoció sus donaciones sin saber que tal comportamiento conllevaba problemas éticos.
Hwang dirigía la Fundación Mundial de Células Madre, el primer banco mundial de ese tipo de células, puesto en marcha en octubre pasado dentro de la Universidad Nacional de Seúl.
Además, es ?padre científico? del primer perro clonado del mundo, Snuppy, considerado por la revista Time ?la invención más sorprendente de 2005?.
