Sin sucesos relevantes se llevó a cabo el festejo del día de la Virgen de Guadalupe, en las inmediaciones del Santuario, ubicado en la Explanada de los Insurgentes, reportaron la Subdirección de Vialidad y la Dirección Municipal de Protección Civil, mientras que la Policía Preventiva remitió a dos sujetos por alterar el orden, a uno por portar arma blanca y al último por drogarse con gasolina en el citado lugar.
Gerardo Herrera Herrera, subdirector de Vialidad, comentó que durante los días previos al festejo citado, se mantuvo una vigilancia importante, colocando dispositivos antialcohol y agentes que apoyaron a los visitantes a conducirse correctamente por las calles aledañas al Santuario, registrando un saldo blanco.
Por otra parte, Homar Cano Castrellón, director de Protección Civil Municipal, informó que no hubo sucesos relevantes en cuanto a apoyo por parte de los elementos de su corporación, y aunque atendieron 25 servicios, no fueron de gravedad.
Agregó que durante esta semana estarán presentes en el Santuario, mientras estén colocados los puestos en la explanada, para prevenir accidentes y supervisar la zona, señalando que mantienen ese lugar seguro, para que toda la gente que quiera acudir sienta la confianza de saber que no corre riesgos.
Por último, Roberto Bravo Ontiveros, director de Seguridad Pública Municipal, comentó que son mínimos los percances que se han registrado, sin que éstos hayan puesto en peligro la integridad de las personas que visitaron el Santuario, habiendose remitido a cuatro personas que alteraban el orden en ese sitio.
Juan Francisco Rivera Rueda, de 30 años, fue detenido por la Policía Preventiva por drogarse con gasolina en las calles aledañas al Santuario de Guadalupe.
Roberto Pineda Quiñones, de 33 años, fue encerrado en las celdas del ?Mercadito? por portar una arma blanca entre su ropa y escandalizar en estado de ebriedad, en la Explanada de los Insurgentes.
René Esquivel Hernández y Carlos Manuel Díaz Acosta, de 30 y 28 años de edad, respectivamente, fueron detenidos por alterar el orden público en las inmediaciones de la iglesia guadalupana.