Los líderes sociales Rolando Álvarez Peña y Federico Soto Rivas reprobaron y pidieron la reconsideración de la medida anunciada para poner vigilancia en el área de las curules de los diputados durante las sesiones del Congreso del Estado.
Entrevistados por separado coincidieron en que esta decisión es negativa porque se interpone un vigilante entre el diputado y la ciudadanía, lo cual deriva en una actitud poco clara para el desarrollo de la función pública del representante popular.
En días pasados, el Oficial Mayor del Congreso del Estado, Manuel Ruiz Herrera, dio a conocer que con el propósito de garantizar un mayor orden en las sesiones de los diputados locales se ubicaría vigilancia en las entradas de la sala de reuniones del Pleno.
En su momento, explicó que en el área de los curules estarían tres personas para no permitir la entrada de personas ajenas, principalmente líderes sociales, que distraigan a los diputados en las sesiones, en aras de una gestoría.
El dirigente de la Federación de Trabajadores Independientes, Rolando Álvarez Peña, dijo que esta medida no es una solución. ?Si lo que se pretende es guardar el orden, que primero los diputados dejen de hablar por sus teléfonos, leer las síntesis informativas o periódicos?, indicó.
Agregó que si en ocasiones hay necesidad de ir a ver a los diputados a la sesión, es porque nunca están regularmente en sus oficinas cuando van a buscarlos. Remarcó que son contados los legislados que van al Congreso cuando no hay sesiones.
?El Oficial Mayor se equivoca, porque no necesita medidas de seguridad sino más bien que los diputados cumplan con sus horarios de trabajo y de atención a la gente para evitar que a la hora de la sesión, ésta acuda con el diputado?, afirmó.
El dirigente de la FTI afirmó que lo único que se va a provocar con esta medida es que precisamente haya más desorden y más escándalos, porque los diputados y en sí el Congreso del Estado se olvidan de atender a la ciudadanía a la que representan, de las mesas de trabajo, de los foros, y si acaso las realizan solamente ellos lo saben.
Por su parte, Federico Soto Rivas, ex regidor del Ayuntamiento capitalino y miembro de la Organización de Defensa Ciudadana, comentó que la figura del diputado está muy denigrada por la ciudadanía, y ésta, a través de los líderes sociales, ve la manera de acercarse con su representante popular.
Reconoció que la función principal del diputado es crear leyes; sin embargo, afirmó que durante la campaña hizo una serie de promesas y de gestoráas que ahora la gente le pide que cumplan.
Soto Rivas destacó que la medida de colocar vigilancia en el recinto legislativo es una muestra de cerrazón, de soberbia. ?Si es una medida que tomó en forma individual el Oficial Mayor está muy mal; y peor si la tomó por sugerencia de los diputados?, enfatizó.
Explicó que como está actualmente el recinto de sesiones, sin tanta vigilancia, está bien, es un espacio más abierto.
Condicionan derecho a la información
Desde el punto de vista del diputado Lorenzo Martínez Delgadillo, el derecho a la información consagrado en la Constitución ?no lo podemos ejercer hasta en tanto los Ayuntamientos tengan aprobado y publicado el reglamento respectivo?.
Reiteró que es de suma importancia que los ciudadanos conozcan sobre el funcionamiento y la actividad que desarrolla la autoridad, pudiendo contar con más elementos para ejercer su derecho a evaluarla.
En este sentido, comentó que de acuerdo a la información proporcionada en los medios de comunicación por la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública, alrededor de 30 municipios no han publicado su reglamento.