Después de celebrarse cuatro series completas en la actual temporada de la Liga Mexicana de Beisbol, ha pasado el tiempo necesario para concluir que una vez más el problema fundamental de Vaqueros Laguna está en el pitcheo.
Vale la pena retroceder el calendario y recordar que la directiva lagunera hizo todo lo posible por tener en el equipo al dominicano José Vargas, cerrador de excelentes cualidades. Como primer inicialista se contemplaba a Doug Linton y el derecho estadounidense incluso firmó contrato con Vaqueros Laguna, durante el clásico caribeño en el puerto sinaloense.
Pepe Vargas en calidad de cerrador y Linton como abridor de cabecera, eran los planes para integrar un staff de pitcheo que ahora sí sacara la cara por el equipo; en Ben Rivera se pensó como inicialista, mientras que Manuel Bernal sería el número uno entre los abridores mexicanos, con Julio César Jiménez y Martín Gómez en busca de los otros lugares en la rotación.
Los planes no se dieron, era necesario modificar sobre la marcha y así llegó la oportunidad para contratar a Adrián ?Duquecito? Hernández?. Se asomó también la posibilidad de Leo Estrella, que en 2003 terminó con 7-3 en ganados y perdidos para los Cerveceros de Milwaukee, pero una lesión le impidió lanzar en 2004, por lo que este año buscaba recuperarse y regresar en un futuro cercano al mejor beisbol del mundo.
Adrián Hernández ha dado muestras de que puede ser el abridor de cabecera, pero aún se espera mucho más de su trabajo; Leo Estrella no convenció en tres aperturas y como una opción que de pronto se presentó, fue contratado el zurdo nicaragüense, Oswaldo Mairena, sacudido el domingo con largo cuadrangular de Bill Selby en la primera entrada, aunque después enderezó su trabajo.
Aspecto clave en el funcionamiento del pitcheo, es el caso de Manuel Bernal, sinaloense que llegó de los Diablos Rojos del México y estaba llamado a ser uno de los abridores principales de la novena, hasta que aparecieron las dolencias en su hombro derecho, las cuales obligaron a cambiar los planes; el derecho fue una baja sensible en el arranque de la temporada y de acuerdo a lo señalado por él mismo, le falta muy poco para subir a la loma de pitcheo, quizá primero en labores de relevo.
Además, Fernando Barreras, Federico Castañeda, Víctor Hermosillo, Carlos Gutiérrez, Emerson Esparza y Ben Rivera, no han dado el estirón que el equipo necesita, mientras que Jesús Treviño, Cristian Bernal y Hugo Verdugo, hoy muestran un saldo positivo. Entre los abridores mexicanos, Martín Gómez ha sido el más regular, Julio César Jiménez inició con dos muy buenas salidas, pero ayer lució inconsistente y en un parque bueno para los lanzadores, fue removido en la segunda entrada.
Carlos García es quizá el que más queda a deber y podría ser el elegido cuando Manuel Bernal se reporte listo para entrar en acción y tomar el sitio de abridor que prácticamente tenía cuando llegó a la organización.
Sin incluir la doble cartelera de ayer en Campeche, Vaqueros Laguna es el sexto lugar en bateo colectivo con .320, 12 jonrones conectaros y 71 carreras producidas, sin embargo, el renglón tan importante de promedio con corredores en base es muy pobre, a pesar de que no es dado a conocer por los números oficiales.
En el pitcheo Vaqueros Laguna ocupa la penúltima posición, su promedio de carreras limpias es de 7.45 por cada nueve entradas, números altísimos que explican la causa por la que el conjunto naranja hoy está en la parte baja de la Zona Norte. Aspecto fundamental del que tampoco informan las estadísticas oficiales, es el número de corredores que reciben los lanzadores relevistas y posteriormente anotan, para incrementar notablemente el promedio de efectividad de los que salen; ahí también se han tenido problemas y juegos casi seguros, se convirtieron en derrotas.
A pesar de no contar con un cuarto bate natural, el equipo lagunero ha tenido un buen comportamiento ofensivo, pero cuando se corrija el aspecto de conectar tantos batazos para doble play, la situación deberá mejorar notablemente. Por momentos se han visto turnos al bate precipitados de algunos elementos y eso es producto de la desesperación que se siente cuando las cosas no salen como se desea; en las dos primeras semanas de temporada regular se han visto muchos turnos de hacer swing al primer lanzamiento, lo que facilita el trabajo del pitcher enemigo, obviamente, en perjuicio de la causa lagunera.
El problema principal es entonces, encontrar la fórmula para que el pitcheo funcione y quizá sea necesario encontrar más refuerzos y traerlos; posteriormente la atención se deberá centrar en conseguir un cuarto bate natural, porque no es la posición de Rudy Pemberton, bateador confiable con Diablos Rojos del México, Acereros de Monclova e incluso Mayos de Navojoa, en donde ya fue campeón bateador. Pemberton sufrió una lesión en el hombro y quizá aún siente molestias, las cuales no le permiten tener la actuación bateadora que de él se espera.