Hoy en día la meta de Vaqueros Laguna es clara, dar alcance a los Potros de Tijuana, y de ahí la importancia de la derrota del domingo anterior contra los de la frontera; anterior a los partidos de ayer la diferencia era de tres juegos con 12 por celebrarse, antes de finalizar la primera vuelta.
Para la directiva del conjunto naranja, el pitcheo es el departamento que requiere mayor atención, y por eso, de cara al compromiso ante los Diablos Rojos del México, se cuenta con dos novedades: el derecho dominicano José Vargas y el zurdo César Martínez, que hasta la temporada pasada formara parte de los entonces Toros de Tijuana. Vargas toma en el roster el lugar de su compatriota Rudy Pemberton, mientras que Martínez es activado en lugar de Édgar Murguía, al que muy mal trataron los Potros el domingo anterior.
Prescindir de Rudy Pemberton no fue una decisión fácil y no porque el dominicano tuviera una buena actuación, sino porque Vaqueros Laguna sufre para conformar el outfield, primero con la lesión de Rafael Álvarez y después con la de Julio Reyes. Ramón Espinosa se vio obligado a dejar el jardín central para cubrir la inicial, también por problemas físicos.
Julio Reyes regresó a la actividad el domingo anterior y lo hizo ya iniciado el partido en el jardín izquierdo, a la ofensiva conectó un imparable y se ponchó en una ocasión, pero al abanicar en ese turno se le vio el swing que lo tenía como el mejor bateador de Vaqueros antes de lastimarse. En el central, Francisco Omar de la Torre cubre a Ramón Espinosa, y el joven de Guadalajara realiza cosas interesantes, sobre todo a la defensiva, en donde demuestra seguridad con el guante, un brazo a la altura de los mejores, con un extra muy importante, la inteligencia que requiere todo jugador que se desempeña en el outfield.
Francisco Omar de la Torre llegó a Vaqueros Laguna en 2003, invitado por José Juan Bellazetín, entonces director deportivo; Omar de la Torre enseñó buenas cosas a la ofensiva, aunque como todo novato evidenciaba defectos a la hora de pararse a la caja de bateo, los cuales con el tiempo ha corregido para convertirse en un pelotero confiable, algo más que un suplente. Omar sabe que le falta mucho por aprender, pero mientras tanto ya destacó en la pasada campaña de la fuerte Liga del Noroeste, en donde conectó diez jonrones y fue de los mejores productores de carreras.
Es importante tener en actividad a Omar de la Torre porque se trata de un outfield natural, a diferencia de Ricardo Ruiz, que cubre el cuadro, y por necesidades del equipo fue utilizado en el jardín izquierdo; se debe cubrir la salida de Rudy Pemberton, y repetimos, no porque haya tenido una gran actuación, sino porque ahí queda un hueco en los jardines, destinado a cubrirse con elementos nacionales que luchan por crecer en este beisbol; Julio Reyes y Omar de la Torre.
Una clara muestra de que lo mejor es poner a cada pelotero en su lugar, fue la forma en que ayer Raúl López atacó un batazo atrapable de Saúl Soto; el hoy jardinero izquierdo de Vaqueros quiso hacer la jugada de cordón de zapatos pero la bola pasó hasta el pie de la barda para un doble productor de dos carreras; son jugadas que parecen insignificantes, pero esa acción se dio con la pizarra empatada a cero, cuando Oswaldo Mairena sostenía un buen duelo de pitcheo con Claudio Moreno.
Adrián Hernández hizo ayer un buen relevo, luego de su ausencia de varios días, para reportarse listo a iniciar el partido del próximo viernes, cuando se ponga en marcha una serie clave, en Tijuana, frente a los Potros, que el domingo se sacaron la lotería al anotar 12 carreras en la sexta entrada.
Después del ?Duquecito? vino a lanzar José Vargas, el dominicano lució una gran velocidad y se vio dominador, aunque en la octava entrada le ligaron dos imparables para hacerle una carrera. Sin embargo, no cabe duda que cuando Vaqueros llegue a la sexta o séptima entrada con ventaja será muy difícil que se pierda un partido, porque Antonio Aguilera tendrá listos para cualquier emergencia a Elio Serrano, José Vargas y Ben Rivera.
Ayer se perdió el primero de la serie frente a los Diablos Rojos del México, y aunque Vaqueros Laguna demostró no ser un ?flan?, es de suma importancia obtener el mayor número de victorias posibles en los 11 partidos que restan para el final de la primera vuelta. Antonio Aguilera trata de encontrar la fórmula del éxito y ayer puso a Cornelio García en donde es más efectivo, como primero en el orden, Abel Martínez fue segundo, Raúl López tercero y el lugar de honor fue para Ramón Espinosa, que conectó cuadrangular.
La decisión de Vaqueros Laguna está tomada, se optó por reforzar el pitcheo y ahora ese departamento luce más sólido, se perdió el aporte de Rudy Pemberton, que no era mucho, y se confía en que la ofensiva se mantenga entre las mejores de la liga para que en el resto de la primera vuelta y toda la segunda, el equipo de Antonio Aguilera juegue muy arriba de .500 y aspire así a llegar al playoff, pero con posibilidades reales de hacer ahí cosas trascendentales
