Se trata de ese aire a Distrito Federal lo que inquieta. Ya no sólo asaltos bancarios, como los cuatro que se registraron en Torreón entre febrero y marzo del año pasado, sino también los robos con “sello chilango” a grandes centros comerciales o restaurantes, los que refieren a bandas bien organizadas de delincuentes, que seguramente ven en la ciudad, campo fértil para golpear y huir.
Bastaría recordar aquel penoso incidente, en diciembre, en un reconocido centro departamental, cuando una banda asaltó en forma simultánea dos joyerías, para darnos cuenta de ciertas fragilidades en la operatividad de los cuerpos de Seguridad Pública. Pero como esto no fue suficiente, ahora hay que sumar un peliculesco asalto a un conocido restaurante, en donde tres hampones robaron no sólo la caja registradora del local, sino también a los clientes.
En el caso del centro comercial, las autoridades concluyeron, luego de las primeras pesquisas, que los delincuentes eran arriesgados, de sangre fría, amplia experiencia y posiblemente foráneos. Ahora, testigos del asalto al restaurante describen a los criminales como hombres de entre 30 y 38 años de edad y con acento sureño.
Ya en referencia a algunos asaltos bancarios, las autoridades habían aceptado que se trataba de bandas bien organizadas que realizaban “golpes de paso”. Entonces, hay que entender el mensaje de la delincuencia: es posible llegar a Torreón, pasar por sus calles un par de días -o semanas, como se prefiera-, ubicar un negocio, cualquiera que éste sea, perpetrar el asalto y huir... así de fácil.
Habrá quien señale hoy que es literalmente imposible prevenir este tipo de hechos delictivos, sobre todo si efectivamente se trata de bandas foráneas, pero los responsables de la Seguridad Pública en Torreón deben entender de una vez y por todas, que las bandas bien organizadas de asaltantes ya fijaron su mirada en esta región y que por lo tanto, sólo les queda el explorar todas las posibilidades disuasivas, para al menos lanzar el contramensaje de que robar en estas tierras no es tan fácil.
