NUEVA YORK, EU.- Incluso en medio del invierno, Alex Rodríguez y Curt Schilling siguen con su duelo. ?Sólo espero que siga hablando acerca de mí y mis compañeros?, dijo ayer el antesalista de los Yanquis de Nueva York. ?Eso nos va a dar una enorme motivación para apalearle en el futuro?.
Luego que Rodríguez fue decretado out por interferencia en el sexto juego de la serie de campeonato de la Liga Americana en octubre, Schilling calificó la jugada de ?callejera?. A-Rod, que trataba de conseguir un sencillo por el cuadro, se sacó la pelota del guante con un manotazo al lanzador Bronson Arroyo cerca de la inicial.
?Para mí es simplemente extraño, porque le vencimos un par de veces en el año, y él estaba llorando en el banco?, dijo Rodríguez de Schilling. ?Y cuando perdió el primer juego (de la Serie Mundial) no habló ni nada. Y entonces gana el sexto juego y aún está hablando. Así que es algo a lo que nos hemos acostumbrado los jugadores. No me preocupa?.
Schilling, contactado el viernes por teléfono, dijo que Rodríguez se equivoca. ?No es cierto. Yo hablé después del primer juego?, dijo Schilling. ?No me importa lo que diga Alex?. El serpentinero negó haber llorado. ?Yo estaba molesto, pero no estaba llorando en la banca?, dijo.
Lanzando con un tendón del tobillo desgarrado, Schilling ganó el sexto juego y Boston se convirtió en el primer equipo en las mayores en ganar una serie de siete juegos luego de estar abajo 3-0. Seguidamente ganó el segundo partido de la Serie Mundial, en la que Boston barrió a los Cardenales, para llevarse su primer título de Serie Mundial desde 1918.
Rodríguez, cambiado por Texas a los Yanquis en febrero pasado tras ganar su primer premio al Jugador Más Valioso, bateó apenas dos hits en 17 turnos en los últimos cuatro juegos de los playoffs contra Boston. En la campaña regular bateó .286, con 36 jonrones y 106 empujadas, pero solamente conectó .248 con corredores en posición de anotar y de 12-2 con la casa llena.
