EFE
GINEBRA, SUIZA.- El antiviral Tamiflu, recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para luchar contra una posible expansión entre humanos de la gripe aviar, se agota en las farmacias de los países donde se vende.
Junto al Relenza (fabricado por GlaxoSmithKline), el Tamiflu es el único medicamento que se comercializa para luchar contra la gripe aviar, aunque no está garantizada su eficacia en el caso que la enfermedad se transmita entre personas, un extremo aún no observado.
El fármaco, que se ingiere en cápsulas, puede frenar la reproducción del agente patógeno en la primera fase de la infección y reduce la tasa de mortandad entre los afectados.
Con la alarma social generada respecto a una posible pandemia entre humanos, las ventas de Tamiflu se han disparado en los países donde se vende en farmacias (Estados Unidos, Canadá, Japón, Australia, Suiza, Francia y varios países de Latinoamérica, entre otros).
El verdadero peligro de la temida gripe aviar reside en que el virus H5N1 mute y sea capaz de contagiarse entre personas, algo que aún no ha ocurrido.
Por ello, todavía no se ha demostrado que el medicamento sea eficaz para detener la expansión de la gripe entre humanos, aunque sí ha demostrado ser efectivo ante el contagio de animales a humanos, de los que se han detectado 117 casos, más 60 de ellos mortales.
Aún así, alrededor de treinta gobiernos ya han encargado millones de dosis a la farmacéutica suiza Roche, que tiene la patente del medicamento genérico conocido como ?oseltamivir?.
Durante 2005 la compañía ha duplicado su producción de Tamiflu y pretende que en 2006 ésta sea entre ocho y diez veces la de 2003.