EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Resultó de fatales consecuencia un descuido de la mamá de una pequeñita de un año de edad que se ahogó en una cubeta con agua, la noche del pasado jueves en Cuencamé, Durango.
Manuel Acosta Cervantes, agente investigador del Ministerio Público de Cuencamé, informa que la niña llevaba por nombre Anahí Alemán Favela, con domicilio calle Seferino Ceniceros 631 de la citada población.
De acuerdo a la versión de María Guadalupe Favela García, como a las ocho y media de la noche se encontraba en su casa platicando con una amiga mientras su hija jugaba dentro de la vivienda. En un momento dado, María Guadalupe no vio a su pequeña y al buscarla la encontró sumergida en un bote con agua que tenía en el patio.
Angustiada al ver que la pequeña no reaccionaba, la llevó al hospital de esa ciudad y al revisarla el médico, le dijo que la niña había muerto ya.
Al tomar conocimiento y dar fe de los hechos, el agente investigador del Ministerio Público dispuso que el cuerpo de la niña fuese trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo), de la Subprocuraduría de Justicia de la Región Laguna Durango, para la necropsia de Ley.
El médico legista que practicó la necropsia, Daniel Ramírez Amador, dictaminó asfixia por inmersión como causa del deceso de la pequeña Anahí. Ayer mismo por la madrugada las autoridades hicieron entrega del cuerpo de la niña a sus padres para darle cristina sepultura.
