MADRID, ESPAÑA, (EFE).- Una tigresa de un circo instalado en Arganda del Rey, a unos 30 kilómetros al este de Madrid, arrancó y se comió ayer el brazo de un hombre que se acercó a su jaula, según informaron fuentes sanitarias.
El suceso ocurrió cuando, por causas que aún se desconocen, el hombre, de 32 años, que iba acompañado por su esposa, metió su brazo derecho entre los barrotes de la jaula en la que se encontraba la tigresa y que estaba situada sobre un remolque, en el exterior de la carpa.
Las fuentes sanitarias precisaron que el animal “seccionó el brazo del hombre por debajo del codo y se lo comió”, por lo que cuando las asistencias llegaron al circo “sólo pudieron recoger los huesos”.
El herido, según los servicios de emergencia, se encontraba consciente y hemodinámicamente estable y fue trasladado al hospital Gregorio Marañón en estado grave aunque “sin compromiso vital”.
En abril de 2003, un tigre del Circo Internacional instalado en el municipio de Colmenar Viejo, a 28 kilómetros al norte de Madrid, también arrancó y se comió el brazo de un trabajador de 28 años y nacionalidad ucraniana que se había acercado a su jaula.
