Protocolo de Kioto establece la reducción de emisiones de gases.
Durango se encuentra ante la oportunidad de registrar un mayor desarrollo en el sector forestal en virtud de que puede ofertar internacionalmente su masa forestal, luego de integrarse al acuerdo ambiental internacional del Protocolo de Kioto.
Lo anterior fue manifestado por Luis Alfredo Rangel Pecador, delegado federal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), quien además destacó que el estado tiene la oportunidad de provocar no sólo un aspecto de conservación ambiental, sino también de generación económica mediante los mecanismos de los servicios ambientales, conservación de suelo y agua.
Explicó que al ser Durango la primera reserva forestal del país, se convierte en un gran generador de bióxido de carbono, del cual se inició el pago por servicios ambientales, en los que se está estimulando la captura de carbono para donde se destinaron 29 millones de pesos a propietarios de predios que captan y conservan el agua.
Durante la firma del acuerdo internacional, con la presencia de autoridades del sector medio ambiente y el gobernador del estado, Ismael Hernández Deras, coincidieron en el compromiso de implementar las acciones necesarias para conservar la integración de los ecosistemas en la lucha mundial por la prevención del cambio climático global, ya que aseguraron que Durango no es ajeno a los fenómenos climáticos que se han registrado en el mundo, pues en la entidad ya se han reportado incidencias.
Por su parte, Lucina Hernández García, directora del centro regional Durango del Instituto de Ecología A.C., explicó que al ser Durango la primer reserva forestal del país, representa uno de los sumideros más importantes del país de algunos de los gases que producen el efecto invernadero, factor principal de cambios climáticos.
Subrayó que existe el compromiso de asumir una obligación a nivel nacional para conservar la integridad de los ecosistemas y destacó que se están realizando acciones con apoyo de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), de pago de servicios ambientales.
La investigadora sostuvo que el cambio climático se ha atribuido directa o indirectamente a las actividades humanas que alteran la composición global atmosférica.
El Protocolo de Kioto
El Protocolo de Kioto de diciembre de 1997 concluyó con la adopción de un acuerdo de reducción de emisiones de gases de invernadero por los países industrializados. El compromiso obliga a limitar las emisiones conjuntas de seis gases (CO2, CH4, N2O, compuestos perfluorocarbonados (PFC), compuestos hidrofluorocarbonados (HFC) y hexafluoruro de azufre) respecto a las de 1990 durante el periodo 2008-2012, en proporciones diferentes según el país.
El Protocolo no obliga en una primera fase a los países en desarrollo, dadas sus menores emisiones por habitante. El año base se compone de las emisiones de 1990 de CO2, CH4 y N2O, y las emisiones de 1995 de los compuestos perfluorocarbonados (PFC), compuestos hidrofluorocarbonados (HFC) y hexafluoruro de azufre).
El Protocolo de Kioto, el cual entró en vigor en México ayer, prevé reducir las emisiones de gases que producen el efecto invernadero en un 5.2 por ciento respecto de los niveles de 1990 en el periodo entre 2008 y 2012.
Fenómenos registrados
Autoridades del sector medio ambiente aseguraron que Durango no es ajeno a los fenómenos climáticos que se han registrado en el mundo, pues en la entidad ya se han reportado incidencias.
-Granizadas e inundaciones que han provocado pérdida de cosechas.
-Sequías prolongadas que han ocasionado muerte de ganado.
-Granizadas excepcionales como la registrada en 2003 en El Salto, Pueblo Nuevo.
-Nevadas, registradas el 12 de diciembre de 1997.
-Plagas y enfermedades que han impactado a los bosques.
FUENTE: Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente del Gobierno del Estado.
