Hilda Romero Gallegos, de 24 años de edad, joven empleada de un negocio de pinturas que se encargaba de vaciar un solvente de un recipiente a otro, resultó con serias quemaduras en los ojos cuando uno de los frascos se le zafó de las manos y alcanzó a salpicarla. Socorristas de la Cruz Roja acudieron hasta el establecimiento comercial para auxiliarla, trasladándola hasta el puesto de socorros donde quedó bajo observación médica.