Acepta el político tabasqueño que el secuestro del entrenador del equipo Cruz Azul, Rubén Omar Romano y reconoció que hacen falta más acciones para disminuir la incidencia delictiva.
MÉXICO, D.F., (SUN-AEE).- El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, dijo que a pesar de dedicar mucho tiempo a los esfuerzos en materia de seguridad, hechos como el secuestro del técnico Rubén Omar Romano empañan el trabajo realizado para reducir los índices delictivos.
El político tabasqueño lamentó el secuestro del entrenador del equipo de futbol Cruz Azul y reconoció que hacen falta más acciones para disminuir la incidencia delictiva.
"Estoy tranquilo con mi conciencia porque hago lo que me corresponde como autoridad", señaló después de preguntarle si estaba satisfecho con las acciones que su administración impulsa en materia de seguridad pública.
Durante su conferencia matutina, el funcionario se comprometió hacer todo lo que esté a su alcance para lograr el rescate del técnico, ya que además de ser un hecho lamentable, su secuestro implica un descrédito para la ciudad de México.
"Nosotros no deseamos que nadie sufra ni padezca este tipo de situaciones, nosotros estamos trabajando todos los días para garantizar la seguridad", enfatizó.
Aceptó que ayer Joel Ortega, secretario de Seguridad Pública, se equivocó al dar una declaración en el sentido de que Romano había sido liberado.
"Todos somos humanos y cometemos errores", argumentó.
También, López Obrador arremetió contra los spots que transmite en la televisión la organización México Unido Contra la Delincuencia. Reiteró que atrás hay una campaña en su contra, instrumentada por el empresario Claudio X. González, que fue asesor del ex presidente Carlos Salinas de Gortari y uno de los promotores más activos durante su desafuero.
Insistió que atrás de esta campaña hay intereses políticos y pidió a su detractor que dé la cara. "No puede estar actuando de manera soterrada ni utilizar algo
que afecta a la gente, con politiquerías", subrayó.
"Esto desde luego no significa que no exista el problema y que no nos importe, pero atrás hay quienes buscan afectarme políticamente", destacó.
El jefe de Gobierno capitalino rechazó opinar sobre la propuesta que analizan algunos legisladores en el sentido de congelar los bienes de las familias de los secuestradores.
"No puedo contestar, habría que verlo", respondió. Sin embargo, insistió que su prioridad como gobernante es que no haya delincuencia y subrayó que no está soslayando el problema de la inseguridad.