Quienes celebran su onomástico o aniversario matrimonial durante el presente mes, muchas felicidades. Que Dios con su benevolencia permita que sigan festejando muchísimos años más de su vida, llenos de dicha y felicidad.
DICIEMBRE, MES DE PAZ Y ARMONÍA
Otro glorioso año más para festejar la Navidad, la cual desde principios del mes empezamos a celebrar. Ver y oír cómo los medios de comunicación y tiendas departamentales anuncian, nuevamente el acercamiento de la Navidad. La decoración especial e iluminación con los árboles y las series navideñas que marcan una vez más la maravillosa época del año, así como los diversos regalos y juguetes que los chiquitines, ya están preparados para recibirlos este 24 de diciembre y que a la fecha son incontables, ya que en la actualidad existen todo tipo y clase de tamaños. Así como las tradicionales posadas que no faltarán, los intercambios de regalos entre familias, compañeros y amigos. Por lo que este mes debido a las gratificaciones, existe la derrama económica, aparte de la felicidad y alegría que irradian estas fechas, pero para otras tantas personas días de tristeza días de nostalgia por haber perdido a un ser querido, o por falta de trabajo, aparte días muy especiales donde nos estregamos a la oración para conmemorar el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo y donde muchas familias, padres abuelos, tíos, hermanos, compadres y amigos que se reunirán para conmemorar este grato acontecimiento. Por otra parte los nacimientos que la mayoría de la gente católica pone tradicionalmente en sus hogares. En si todo lo relacionado con el significado a lo que es la verdadera Navidad, la que nos hace pensar y recapacitar que los niños al igual que los adultos tenemos cosas muy importantes, como son el dar y recibir. Y creo que para aprender de los pequeños, es la mejor manera de ponerse en el papel de ellos. ¿Cómo?, tratando de sentir lo que ellos sienten, pensar en lo que piensan, preguntar y preguntar hasta explorar la raíz de sus ideas, entenderlos y escucharlos sin criticar sus puntos de vista, compartir nuestros puntos de vista con total apertura, confiar y dar confianza, no dejar que en nuestras cabezas queden ideas que no salen por la boca, discutir pero nunca pelear, aceptar nuestras diferencias. Esto es darse al máximo, esto es la Navidad. Por lo que fácil sería la vida si en nuestros hogares, trabajos, y en donde sea, practicáramos todos estos ?ejercicios? quien sólo a veces la Navidad nos lo recuerda. No cuesta nada y se siente muy cómodo, hagámoslo; pero todos, si no, no resulta. No esperemos un día al año para ser como queremos ser. ¿Qué acaso sólo el 14 de febrero podemos dar amor y amistad? Tampoco esperamos la próxima vida o lecciones de vidas anteriores. Sintámonos libres y disfrutemos la Navidad como queramos.
A LAS AUTORIDADES MUNICIPALES
Las autoridades municipales pregonan que desde el inicio de esta administración, empezó a surgir el cambio y yo me pregunto.¿Cuál cambio? Si todo sigue igual que años anteriores. Pongamos algunos ejemplos que tal vez no sirvan para nada porque a estas horas, lo más preocupante para ellos es tratar de buscar un lugarcito para ver en dónde van a quedar en la próxima administración. Por lo que los agentes de vialidad, policías, auto transporte y ecología, están haciendo su agosto o celebrando el famoso año de hidalgo. Si no amigo lector vea usted mismo, cómo por todas partes estos señores se las gastan deteniendo a toda clase de vehículos (dizque con algún pretexto) para extorsionar algún incauto. Y la autoridad amén, ¿cuál autoridad?, ya que cientos de automovilistas son esquilmados diariamente por estos malos servidores públicos tal vez creyendo que son sus últimos días de servicio. ¡Ojalá! Porque si continúan Dios nos agarre confesados ya que seguirán haciendo de las suyas. ¿O no está de acuerdo conmigo, amigo(a) lector(a)?
¡REFLEXIONES...!
A eso. A eso de caer y volver a levantarte, de fracasar y volver a comenzar, de seguir un camino y tener que torcerlo, de encontrar el dolor y tener que afrontarlo. A eso..., no le llames adversidad, llámale sabiduría. A eso de sentir la mano de Díos y saberte importante, de fijarte una meta y tener que seguir otra, de huir de una prueba y tener que encararla, de planear un vuelo y tener que recortarlo, de aspirar y no poder, de querer y no saber, de avanzar y no llegar. A eso..., no le llames castigo, llámale enseñanza. A eso de pasar juntos días radiantes, días felices y días tristes, días de soledad y días de compañía, días monótonos y días de aventura, días de egoísmo y días de amor. A eso..., no le llames rutina, llámale experiencia. A eso, de que tus ojos miren y tus oídos oigan, que tu cerebro funcione y tus manos trabajen, que tu alma irradie y tu sensibilidad sienta y tu corazón ame... A eso..., no le llames poder humano, llámale milagro divino.
A eso, de que asistas el día de hoy a una reunión muy importante, deja de que tus ojos estén leyendo este mensaje y lo disfrutes y tengas esa sensación de cariño... A eso..., no le llames casualidad, llámale amistad.