EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Sentencia condenatoria de 34 años y seis meses, le fue dictada a Víctor Manuel López Silos, de 23 años, alias ?El Quiroga? y Luis Alberto Morales Argumaniz, de 22 años, alias ?El Atún?, por el homicidio de un joven militar, ocurrido el 27 de junio de 2004.
María Mayela Hernández Valadez, titular del Juzgado Primero, informó sobre la resolución del proceso penal 97/04, donde aparece como agraviado Alberto Pérez Soriano, de 25 años, militar destacamentado en el campo de La Joya.
Homicidio calificado con la agravante de la alevosía, fue el delito por el cual recibieron sentencia los responsables del crimen, de los cuales, ?El Quiroga?, actualmente se encuentra paralítico, luego de caer de una cama, a un mes de su internamiento en el Centro de Readaptación Social (Cereso).
Como se informó en su oportunidad, un día después del asesinato, fueron detenidos los presuntos y arraigados por 15 días, mientras de integraba la averiguación previa, y se recababan los resultados de química sanguínea y la declaración de familiares de los inculpados.
De 14 puñaladas murió Pérez Soriano, quien fue descubierto en la madrugada del domingo del día siguiente por policías preventivos. ?El Quiroga? y ?El Atún?, vivían en una casa de la colonia La Joya, donde también daban hospedaje a quien se convirtió en su víctima.
Sobre el móvil, primero se manejó un posible robo, pero después, en su declaración ante el Ministerio Público, los señalados reconocieron que su víctima estaba molesta porque se dio cuenta que ?El Quiroga? y ?El Atún?, habían le robado y el día de los hechos le cobraron un dinero por un favor sexual que recibió de una mujer.
La ocasión para matarlo se presentó cuando el sábado pasado 26 de junio del año en curso, se celebró un baile en el poblado en mención al cual asistieron el occiso y sus dos victimarios, en donde estuvieron ingiriendo bebidas embriagantes hasta cerca de las nueve y media de la noche.
Cuando iban caminando, según manifestaron en su declaración ministerial ambos detenidos, el militar continuamente se llevaba la mano hacia atrás a la altura de la cintura, por lo que creyeron que portaba un arma, situación que desencadenó los hechos en los que perdió a vida Pérez Soriano.
Hallazgo
Patrulleros de la unidad 35372 de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), descubrieron un rastro de sangre por un camino de terracería localizado a unos 300 metros de la carretera Torreón-Matamoros, poco después de las nueve horas del lunes 28 de junio de 2004.
Antes de llegar al sitio, cercano al ejido El Águila, uno de los agentes descendió de la patrulla para investigar las huellas de sangre que se dirigían a un sitio plagado de matorrales y fue donde descubrió el cadáver de quien en un principio se le identificó como Abdías Linares Hernández, pero más tarde se confirmó que se llamaba Alberto Pérez Soriano, militar de 28 años de edad.
Fueron 14 puñaladas las que recibió el occiso. El rostro estaba cubierto por su propia playera. Sus victimarios, Víctor Manuel López Silos y Luis Alberto Morales Argumaniz, lo arrastraron hasta ahí para cubrirlo con ramas de los mezquites. Ya recibieron sentencia.
