Primero dijeron que era de lo más conservador y que con él, el PAN iba a la derechización; luego filtraron a la prensa que su amigo personal, Nahum Acosta Lugo, a quien él trajo desde Sonora para colocarlo en la Coordinación de Giras Presidenciales, era informante del narcotráfico y deslizaron que esa relación lo involucraba también en la peligrosa actividad; y ayer Manuel Espino Barrientos, con todos esos señalamientos en contra por parte de sus compañeros panistas, derrotó a Carlos Medina Plascencia y a las cúpulas que apoyaron al guanajuatense. El líder saliente, Luis Felipe Bravo Mena, medio Gabinete -Josefina Vázquez Mota, Javier Usabiaga y Rodolfo Elizondo-, tres aspirantes presidenciales, Felipe Calderón, Francisco Barrio y Alberto Cárdenas, además de la figura moral de Luis H. Álvarez, no pudieron contra el ultraconservador Espino y fueron estrepitosamente derrotados. Todos ellos apostaron a una fallida candidatura de unidad con Medina y fueron vencidos por la sagrada trinidad que el sábado tomó el control del PAN y definirá rumbo y candidatura en 2006: Santiago Creel Miranda, Diego Fernández de Cevallos y Ramón Muñoz, representan el nuevo poder dominante en el partido gobernante, con todo lo que sus nombres representan. El fanatismo confesional del oscuro Muñoz, aunado a la ambición de poder -y negocios- de Diego, y el inepto pragmatismo de Creel, fueron ayer la fórmula que eligieron la mayoría de los miembros del Consejo Nacional del PAN que dieron el triunfo a Manuel Espino. Calderón y Barrio no sólo fueron derrotados, sino que su aspiración se complicará por más juramentos de imparcialidad que haga Espino. Santiago Creel, en cambio, ve cómo se reacomodan sus piezas y su pragmática alianza con el conservador Espino le garantiza el control del proceso interno para elegir al candidato presidencial. Al final de esta contienda en donde “narcopolítica”, infiltrada en las entrañas mismas de la casa presidencial, la ultraderecha y las pugnas de un panismo que se niega a soltar tan pronto el poder que por décadas buscó -y que en este sexenio sólo ha tenido a medias-, lo que parece claro es que al senador Carlos Medina Plascencia, quien sumó una más a su historial de derrotas, el retiro lo llama. Dijo que esperaría a terminar su encargo en el Senado para retirarse a su rancho en Guanajuato. ¿Para qué retrasar la dignidad senador?
Notas Indiscretas... Las imágenes y lo ocurrido en la 19 Asamblea Nacional del PRI no dejan muchas dudas: Roberto Madrazo Pintado llegó a Puebla como el aspirante priista mejor posicionado hacia 2006 y regresó de allá con la candidatura presidencial en la bolsa. Con su faceta de político conciliador y mano suave, Madrazo manejó el foro priista, caló a Elba Esther Gordillo y, operó tan hábilmente con su grupo, que sin que se dieran cuenta los gobernadores del TUCOM y el senador Enrique Jackson, acudieron a la confirmación del que será el próximo abanderado presidencial priista. Sólo había que observar las imágenes en un enlace que desde Puebla hizo la periodista Adela Micha: a la izquierda de la pantalla un Madrazo que hablaba pausado, seguro y seducía a la pantalla con su expresión corporal; a la derecha un encorvado Jackson que se tocaba el oído para oír a la conductora y gesticulaba antes de responder trastabillante. ¿Cuál cree usted que ganó la partida en Puebla?... David Penchyna volvió de Puebla con más enemigos que logros que presumir. Desde la mesa de Estatutos, Penchyna enfrentó los reclamos del TUCOM por presuntas manipulaciones; pero además cierta dama, maestra de profesión, lo acusa de ser el operador de una sucia campaña en su contra, cuya última expresión fue la filtración del predictamen que buscaba anular a la señora como dirigente. Y por si fuera poco a Penchyna lo señalan también sus paisanos de Hidalgo de haber hecho mancuerna con el perdedor José Guadarrama para filtrar a la prensa ciertos documentos que exhibieron al gobernador electo Miguel Osorio Chong por su incompleto grado de estudios. Demasiados frentes para Penchyna... Se engallan los dados. Escalera doble.