Washington, (EFE).- "Si fumas estás despedido" es el lema de una empresa de EU que despide a quien fume, sin importarle cuándo o dónde, lo que ha suscitado el debate sobre el derecho del empresario a regular los hábitos de los empleados fuera del trabajo.
Las organizaciones defensoras de los derechos civiles y los especialistas laborales ya han cuestionado la legalidad de esta medida, que para muchos representa una violación de los derechos individuales por parte de la empresa.
La compañía en cuestión es Weyco, una pequeña firma de seguros médicos con sede en Okemos (Michigan) que obliga a su personal a someterse a pruebas para comprobar si son o no fumadores y que este mes despidió a cuatro personas por negarse a hacer esas pruebas.
"No quiero pagar por los resultados de fumar", aseguró su presidente y fundador, Howard Weyers, quien declaró a algunos medios de comunicación que no descarta incluso ir más lejos y tomar medidas similares contra otros hábitos dañinos como el seguir una mala dieta, lo que le llevaría a despedir también a los obesos.
Algunas organizaciones sociales ya han puesto el grito en el cielo porque, por esa regla de tres, la empresa puede despedir a los que no hagan deporte, a los que tomen el sol -por el riesgo a contraer cáncer de piel- o a las embarazadas por los problemas que puedan tener en el parto.
Se trata de un caso de "discriminación por estilo de vida", según la principal asociación de derechos civiles estadounidense, la Unión de Libertades Civiles (ACLU), que considera que la compañía está violando los derechos privados de los trabajadores.
Los responsables de la ACLU en Michigan ya han anunciado, sin embargo, que no van a tomar ninguna iniciativa en contra de la empresa porque "no hay ninguna ley que impida a Weyco hacer esto", afirmó uno de sus portavoces.
La prensa local recoge el apasionado debate suscitado por este nuevo capítulo de la guerra contra el tabaco en EU, con declaraciones de defensores y detractores de la medida.
"Es estúpido porque fumar es legal", declaró al diario Lansing State, uno de los ciudadanos encuestados, quien asegura que si tuviera que decidir entre fumar o trabajar, "dejaría el trabajo".
Otros, aunque son los menos, dicen que cuando se enteraron de la noticia lo primero que pensaron es que les ayudaría a dejar el vicio, o que no es para tanto porque la empresa, antes de llegar al despido, ofrece ayuda a quien la necesite para dejar de fumar.
La polémica se ha extendido al ámbito nacional y a las grandes televisiones, como la CNN, donde se ha sometido a votación del público la legalidad o no de la medida aprobada por Weyco.