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MÉXICO, DF.- Luego de cuatro años de no pisar un escenario teatral, la primera actriz Silvia Pinal regresa con la comedia Debiera Haber Obispas, del dramaturgo mexicano Rafael Solana, y en la que es acompañada por actores como Julio Alemán, Gustavo Rojo, Martha Ofelia Galindo, Rafael Rojas y Pompín III La actriz que alcanzó el reconocimiento internacional al protagonizar varios de los filmes del cineasta español Luis Buñuel, entre los que sobresalen Viridiana y El Ángel Exterminador, habló sobre su retorno a los escenarios nacionales, de sus 57 años de carrera y su amor por el teatro, el cine y la televisión.
Su regreso se llevará a cabo a través de una gira que arrancará el 17 de febrero en Toluca, Estado de México, para luego recorrer diversas ciudades de la República Mexicana, después de lo cual en abril próximo iniciar temporada en algún teatro del Distrito Federal.
"Regreso después de cuatro años de no hacer giras, porque hice una obra llamada ?Gipsy?, que tuvo mucho éxito pero que no pudo hacer giras. Me gusta empezar con una porque es como continuar una cosa que dejé pendiente y después de ella la idea es ponerla aquí en la Ciudad de México", comentó.
La actriz que tiene una trayectoria de 57 años, en la que ha filmado cintas como La Marca del Zorrillo, El Rey del Barrio, El Inocente y Simón del Desierto, aseguró que su regresó a los escenarios es destacable también porque nunca antes había trabajado una obra de un autor mexicano.
"Me encanta hacer una obra de don Rafael Solana, porque yo se lo debía moralmente, yo la hice en televisión, en Televiteatros, y él me dijo: ?yo quisiera que usted hiciera Debiera haber Obispas en teatro, porque es una obra para una actriz como usted?; ya estaba muy malito y yo le prometí que la iba a hacer", aseveró.
Así, interpretará a Matea, la protagonista de la historia que han hecho otras destacadas actrices mexicanas como la recién fallecida Ofelia Guilmain y María Teresa Rivas, lo que confirma que la obra se ha convertido en un clásico que hacen las grandes.
"Hace unos días estaba platicando con María Teresa Rivas y me dijo: ?fíjate que don Rafael nos regalaba a todas las que hacíamos el papel de ?Matea? un rebozo morado, porque tiene que ver con el obispado?, entonces yo, como no está Solana, me voy a comprar mi atuendo y me lo voy a regalar", abundó.
Añadió que hay una tradición y cosas muy lindas en torno a esta puesta, se trata de una obra muy buena a lo que se suma al trabajo de un gran reparto que la cobijan al llevar el protagónico.
"Todos los papeles son estupendos, son chiquititos, medianitos, grandecitos, todos tienen un momento en el que destacan, todos tienen su gran escena y creo que es lo maravilloso de esta obra, con un reparto tan grande porque somos ocho personajes", expresó.
La Pinal, como la llaman sus amigos, dijo que la vigencia de este montaje está en la relación que existen entre la religión y la política, pero también en el interés de las mujeres de ocupar puestos que antes estaban solo destinados a los hombres, y comentó que "como están las cosas actualmente, puedo llegar a senadora".
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Bajo la dirección de José Solé y producida por Rubén Lara, Debiera Haber Obispas parece ser un traje a la medida de Silvia Pinal, porque a pocas como ella se les da la comedia, tal vez porque ella dice amarla, tan sólo después de la comedia musical.
- Silvia Pinal ha hecho telenovelas, la más reciente en 2004, Amarte es mi Pecado, y en decenas de películas en México, España, Cuba, Argentina, Chile y otros países: Sus series televisivas, como Mujer, Casos de la Vida Real, han alcanzado gran éxito, lo que tiene mucho qué ver con su formación y trabajo en el teatro. "Lo maravilloso de esto es que el teatro le da a uno una sabiduría, una experiencia que sirve para el mismo teatro, pero también para el cine y la televisión, porque el escenario desenvuelve, en él me siento como pez en el agua", dijo.
- Dejó en claro que de igual forma se mueve "en el cine y en la televisión, pero también creo que el teatro es más agradecido porque hay una respuesta inmediata".
- La protagonista de obras como Mame, Qué tal Dolly y Gipsy aseguró que esas tres obras son las que han sido protagonizadas por las grandes actrices del mundo, y a ella la han dejado muy satisfecha, pues es la única en México que las ha hecho.
- Dijo que su director preferido, su maestro de toda la vida es José Luis Ibáñez, quien la dirigió en varias piezas de teatro, que es un arte que tiene sus bemoles, acotó, pero no como el cine en el que "estás a expensas de todo; en ese sentido, tal vez la televisión sea la más generosa, porque quien no quiere ver le cambia o la apaga".
- Pinal, quien aseguró que está enfocada en cuerpo y alma a la gira que realizará con "Debiera haber obispas", subrayó que "siempre hay algo nuevo, siempre hay una obra, un momento, un reto diferente, siempre hay cosas distintas que se pueden hacer en la vida profesional".
FUENTE: Notimex
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Le sobran piropos
Su vida la ha dedicado a la actuación, ha recibido infinidad de premios, varios de ellos por su trabajo en cine al lado de grandes directores y actores; es considerada la única leyenda viva de la Época de Oro del cine mexicano y la única mexicana que brilló con Luis Buñuel, por lo que afirmó que no cambiará nada de lo hecho.
"¿Qué cambiaría o qué dejaría de hacer o qué hubiera evitado?, yo sé que nada, porque si no hubiera hecho lo que hice no sería quien soy, eso me lo dijo (el crítico e historiador del cine mexicano) Emilio García Riera, no lo inventé yo", comentó.
Detalló que García Riera un día le envió El Libro de Cine de Silvia Pinal, el primero de una serie que organizó la Universidad de Guadalajara sobre el tema, y que el crítico le dijo que había hecho muchas películas malas.
Pero "me dijo: ?no te sientas mal, porque si tú no hubieras hecho lo que has hecho no serías quien eres?, y tenía razón", puntualizó la actriz que expresó por último que espera mucho de "Debiera haber obispas".
El montaje recorrerá diversas plazas del norte de México y luego de hacer un receso visitará el sureste, a fin de que a mediados de abril inicie temporada en la Ciudad de México.