El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- Los representantes legales de Alfonso Cordero González, empresario estadounidense, anunciaron que solicitarán juicio político contra Enrique Martínez y Martínez, gobernador de Coahuila, Oscar Calderón Sánchez, procurador de Justicia en el Estado, Raúl Sifuentes Guerrero, ex secretario de Gobierno, y Javier Lechuga, ex secretario particular del mandatario.
Jorge Medina Elizondo, Francisco Tiburcio Celorio y Joao Barrera Castillo, representantes del empresario que radica en los Estados Unidos de Norteamérica pero que es de origen mexicano, dieron a conocer que su cliente fue víctima de un fraude por 8.5 millones de pesos por parte de Juan Carlos Ruenes Moscoso, empresario lagunero.
Según la explicación de los representantes legales, el Laguna Trade Center y el esqueleto del hotel Quinta Real, ambos inmuebles ubicados frente al aeropuerto, son mudos testigos de una maquinación fraudulenta que desprestigia a empresarios y autoridades de esta ciudad y que pone en riesgo la inversión en la Comarca Lagunera.
Francisco Tiburcio Celorio dijo que Oscar Calderón Sánchez podría estar protegiendo a Juan Carlos Ruenes Moscoso y algunos de sus colaboradores, en una defraudación de 8.5 millones de dólares, en la que se coludieron contadores públicos, abogados y notarios que se ostentan como honorables y éticos.
?Tanto las autoridades estatales como locales no han hecho nada por resolverlo, por lo contrario, han beneficiado a los probables responsables y han creado las condiciones necesarias para que el delito quede impune y eso no lo vamos a permitir?.
Alfonso Cordero González, dijo, sólo quiere justicia y una prueba es que cuando el empresario recupere los 8.5 millones de dólares, los donará a una institución de beneficencia dedicada a proteger la niñez de Coahuila, además de 250 mil dólares, esta cantidad será entregada el próximo 10 de noviembre.
?Ya nos cansamos que, desde el Gobernador para abajo, no procuren justicia, tenemos pruebas de que hay gente involucrada en el gobierno estatal que quiere defender a estos delincuentes, tal es el caso de Raúl Sifuentes Guerrero, por eso si es necesario presentaremos una solicitud de juicio político, agotaremos todas las acciones que nos marque la Ley porque no vamos a permitir impunidad, esas son las instrucciones que tengo, y el hecho de que la administración esté por concluir no será un impedimento?.
Según el representante legal, Sifuentes Guerrero trató de justificar la actuación de dos notarios públicos, ?nos quejamos con el Gobernador, le hicimos ver que eso sólo podía ser producto de la ignorancia o corrupción, pero no hizo nada, ahora Raúl Sifuentes hasta se ostenta como dueño del Laguna Trade Center, incluso hizo su campaña política en este lugar?.
Oscar Calderón Sánchez, agregó, debe explicar por qué el proceso legal contra Juan Carlos Ruenes Moscoso acabó con una solicitud que el funcionario hizo de un sobreseimiento, ?le otorgó un perdón por considerar que es inocente de los cargos, que explique por qué al día de hoy está detenido el expediente?.
En corto
Los representantes legales aseguran que funcionarios y ex funcionarios del gobierno del Estado, están involucrados por los siguientes motivos:
-Oscar Calderón Sánchez porque en un juicio que se siguió en contra de Ruenes en el Juzgado Tercero Penal de Torreón por el delito de robo, ordenó a sus subordinados que se desistieran de la acusación que habían hecho en contra del empresario lagunero, y en consecuencia, el presunto delito quedó impune.
-A pesar de que se demostró que los notarios públicos, Feliciano Cordero Sánchez
y Eduardo Martínez Salas, cometieron conductas ilícitas, Raúl Sifuentes Guerrero señaló a la Procuraduría que ambos actuaron debidamente.
-Javier Lechuga Jiménez, ex secretario particular del gobernador, nunca intervino para combatir las irregularidades que le fueron denunciadas.
-Según los representantes, no es posible que el gobernador haga una campaña política de ?Vamos Derecho?, y tener trabajando a toda esa gente, por lo que lo acusan de solapar a sus funcionarios y ex funcionarios.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón