Los elevados precios del petróleo y las altas tasas de interés, los factores de riesgo
Notimex
México, df.- La creciente demanda de materias primas de la región y las expectativas de sólidas ventas permitirán un
desempeño operativo positivo para las empresas en América Latina en 2005, aunque los elevados precios del petróleo y altas tasas de interés podrían ensombrecer sus resultados.
Si los precios del crudo continúan en máximos históricos por un largo periodo podrían desencadenar una desaceleración económica mundial, con impacto negativo sobre los precios de las materias primas, la demanda externa y las ventas e ingresos de muchas empresas, advierte un estudio de Standard & Poor?s (S&P).
A su vez, señala, las tasas de interés podrían subir en respuesta a un fuerte crecimiento económico mundial o por factores locales, tales como el entorno político y social previo a las elecciones presidenciales en varios países, como Brasil y México en 2006.
Un aumento considerable de las tasas de interés impactaría de manera negativa la inversión productiva en la región, el acceso al financiamiento y la competitividad de las empresas en América Latina, señala el documento.
De acuerdo con la calificadora de riesgo crediticio, las empresas en América Latina mostrarán un desempeño operativo positivo en 2005, favorecidas por las expectativas de sólidas ventas a nivel global, la fuerte demanda de materias primas producidas en la región y el nivel todavía bajo de las tasas de interés.
Para S&P, la economía global seguirá con su ritmo de crecimiento -aunque a una tasa menor- y continuará la demanda de materias primas, lo cual beneficiará a los exportadores latinoamericanos. Además, la inversión planeada en infraestructura de la región, el gasto privado en algunos sectores y la recuperación gradual del poder adquisitivo de los trabajadores, junto con el acceso al financiamiento, contribuirán al panorama estable de esas empresas.
El reporte señala que existen pocas posibilidades de que el refinanciamiento se convierta en un riesgo común, ya que muchas empresas han prefinanciado y contratado créditos bancarios o emitido bonos en anticipación de sus vencimientos de este año.
El aumento esperado en las tasas de interés en Estados Unidos y por consiguiente en los países latinoamericanos, podría impactar de manera negativa las coberturas de intereses, pero sólo de manera marginal en 2005.
Ello, explica, porqué la inversión de capital por parte de las empresas privadas luce mixta, ya que algunas industrias todavía tienen capacidad instalada disponible.
Por ejemplo, refiere, algunos exportadores brasileños, operadores regionales de telecomunicaciones y productores de energía planean importantes inversiones durante 2005, pero las empresas manufactureras de México y Argentina no gastarán mucho. En lo que se refiere al desempeño por sector durante 2005, las empresas de productos de consumo y autoservicios o de comercio minorista, están entre las más estables y con menos endeudamiento.
Así, prevé, podrían registrar crecimientos en línea con el PIB, (Producto Interno Bruto) debido al repunte del financiamiento al consumo y a la recuperación del poder adquisitivo. Sin embargo, algunos productores de bienes de consumo podrían ver presionados sus márgenes por insumos más caros.
En el sector de telecomunicaciones, la calificadora espera una mayor consolidación y la continuación de agresivos planes de inversión para aumentar la base de suscriptores.
Expone además que el inicio de importantes ciclos electorales en varios países generará mayor gasto de publicidad de los partidos, lo que beneficiará a las empresas de televisión y medios, pero no se espera un gasto mucho mayor al de 2004 por parte del sector privado.
De igual manera, las empresas de construcción, materiales y vivienda continuarán creciendo gracias a las inversiones planeadas en infraestructura y a la construcción de viviendas de interés social, en particular en México.
Sin embargo, los altos precios de materias primas como el acero y el cemento, entre otros, podrían presionar los márgenes operativos y el capital de trabajo. En el caso de las productoras de materias primas, como el cobre, la celulosa y algunos productos químicos, lo más probable es que los precios se mantengan altos en 2005 apoyados por la fuerte demanda mundial y al bajo nivel de inventarios, añade S&P.
Sin repercusiones
El "ruido" político con miras al proceso electoral de 2006 no tendrá mayor repercusión en materia económica, por lo que no hay motivos de preocupación, asegura el director general de HSBC México, Sandy Flockhart.
Resalta que el crecimiento de la economía mexicana será impulsado este año principalmente por la fortaleza del mercado interno, que retoma su rumbo de crecimiento, luego de tres años de recesión.
En su opinión, la economía nacional observará un crecimiento similar al del año pasado, por lo que descarta que le afecten acontecimientos de carácter político, pues son procesos normales en cualquier democracia.
A pesar de que se mantendrá la estabilidad económica en el país, advierte, no deben postergarse por más tiempo las reformas estructurales en materia fiscal y energética.
En entrevista, Flockhart reitera que 2005 será un año de oportunidades y de crecimiento para el país en todos sus ámbitos, en donde la banca no será la excepción, pues ha superado todas sus crisis, además de que el crédito va a registrar un repunte importante.
El reto ahora, dijo, es elevar la competitividad y eficacia de la banca en México para garantizar una mejor atención a los usuarios.
El director general de HSBC México participó días atrás en un ciclo de conferencias organizado por el Tecnológico de Monterrey, en donde expuso que si México mantiene su buen manejo de la política macroeconómica y concreta sus reformas, tendrá un crecimiento económico a tasas más altas en las próximas décadas.
