Desoyen autoridades municipales quejas de los habitantes afectados
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- La mayor parte del día, lo único que brota de los grifos de los colonos de Parque Hundido es “aire”, pues aunque tienen ya dos años con un problema del desabasto de agua, las autoridades sólo les han respondido con evasivas.
Doña Consuelo, quien se dedica al hogar, comenta que de su toma de agua se escuchan sonidos y se siente aire, pero el vital líquido sale en chorritos sólo a veces y sus nietos están “avisados” de que deben poner a llenar todas las tinas que encuentren, pues no tienen la certidumbre de que vuelva a salir en el resto del día.
La señora explica que ya han acudido grupos de colonos a la Presidencia Municipal en múltiples ocasiones para pedir una solución a esta cuestión, pues asegura que pagan sus recibos por concepto de este servicio, pero el problema nunca ha sido resuelto.
“Ya fuimos con la problemática a la Presidencia y a Sideapa, hemos pedido que nos digan cómo arreglar esta situación tan difícil pero nomás dicen que ya lo van a resolver y así se la llevan”, explica la vecina, “dicen que sí pero la verdad es que ni siquiera han venido a checar”.
La falta de vigilancia policiaca es queja frecuente en las diversas colonias de la periferia, pues según afirman los vecinos, las patrullas pasan, pero no entran a recorrer las calles de la comunidad, por lo que, desde hace unos meses, se ha presentado la situación de que grupos de jóvenes se reúnen en una esquina y luego se dedican a hacer destrozos a las viviendas cercanas.
Los vecinos se quejan mucho de esta situación, pues sus casas amanecen con “graffiti” en las paredes y en ocasiones, con vidrios rotos a causa de las pedradas.
“A veces pasan pero ni se meten, mejor andan ahí saludando, pasan y les dicen adiós desde la patrulla”, añade Estela, otra de las vecinas, “no sirve de nada señalarlos siquiera, porque luego la agarran contra la casa de una, pero la policía no hace nada”.
En la colonia Parque Hundido también carecen de pavimento en las calles, que son de tierra, y algunas de basura y escombro. Tampoco hay numenclaturas en las diversas vías y son pocas las viviendas que cuentan con número. Muchas de las personas desconocen, incluso, el nombre de su calle.
Charcos y basura
La parte norte de la colonia Sector Tres se ubica en un nivel más abajo que la mitad sur. Cuando los colonos “de arriba” lavan y tiran agua, el vital líquido siempre termina como charco en la parte baja de la comunidad.
Además, es aquí también donde los vecinos de colonias aledañas han ido almacenando basura, que da mal aspecto y malos olores a los habitantes de la parte más humilde.
Los colonos que viven sin los servicios básicos se quejan de que tampoco los camiones recolectores de basura entran a sus calles sin pavimento, por lo que, en muchas ocasiones, depositan su basura en el montón que divide a las dos partes.
Deterioro
Dentro de esta colonia hay una cancha de basquetbol con algunos columpios y un resbaladero que se encuentran en malas condiciones, tanto por el uso como por la falta de mantenimiento. Según señalan los vecinos, ya son pocos los niños que los utilizan, pues están muy deteriorados.
Juan José, sexagenario que tiene su vivienda cerca de esta área recreativa, cuenta que sus nietos solían jugar en este lugar con frecuencia, pero recientemente uno se cortó con la lámina suelta del resbaladero y dejaron de ir.
Agrega que el sitio resulta un tanto peligroso, pues muy cerca de aquí se reúnen jóvenes vándalos, que luego hacen destrozos por la colonia y lugares aledaños, ante la poca presencia policiaca.
