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México, DF.- El cineasta Roberto Gómez dijo ayer que su película Puños Rosas, que se estrenará el viernes en México, no fue planeada para el público gay, pues además de plantear una historia de amor ?diferente?, va más allá de cualquier concepto sobre el narcotráfico, la frontera norte, el uso del ?spanglish?, los judiciales y los boxeadores.
?Es una historia honesta y necesaria que no pretende caricaturizar contextos, sino exponerlos tal cual?, apuntó en conferencia de prensa.
Mencionó que seguramente se dividirán opiniones con respecto a la trama homosexual que se aborda y esto, lo atribuye a que en México se le tiene miedo al color rosa, porque está clasificado para el público femenino.
?El criterio estará abierto para cada quien. Sólo es una relación de amor que se da entre un pistolero y un chico que trabaja en una funeraria, lo importante es que le guste a la gente. La comunidad gay la ha recibido bastante bien porque no ofende es una historia que evita los clichés homosexuales?, aseveró.
Precisó que el público verá una película arriesgada que rompe el esquema de las cintas egresadas de la capital. ?Es -dijo- una historia universal que habla de un amor más canalla?.
Comentó que la idea de hacer esta película surgió de su gusto por las historias sobre gangsters y los westerns, y señaló que lo que más le interesaba era acercarse al mundo de la frontera, pero de una manera honesta.
Abundó que la manera ideal para hacerlo consistía en comprender la forma en como se vive ahí, que pese a la existencia de violencia, existe un lado humano importante y sobre todo, prevalecen historias de amor, que a veces sólo pueden ocurrir en México.
?Esto del cine es bastante complicado, pero creo que lo más importante es creértelo tú mismo e inyectarle pasión necesaria. Puños Rosas no fue un proyecto fácil, pero me sentía más curtido para lograrlo. El apoyo de mi familia, de mis amigos, de actores que ya habían trabajado conmigo y el propio proyecto en sí, hicieron que las cosas fueran encontrando su camino?, resaltó el director.
Destacó su gusto por las historias universales y en especial por las diferentes que no ahonden en el asunto del cliché.
Explicó que decidió incluir en el reparto a actores del norte, y en escenarios reales. ?Creo que Matamoros (Tamaulipas) y la frontera de Estados Unidos, así como su gente, tienen un gran protagonismo en esta película?, comentó.
?Tuve la suerte de tener un gran apoyo de la gente de Matamoros, de la de Brownsville, Texas (ambas fronterizas), del gobierno de Tamaulipas, de la cárcel de Matamoros, en fin, me interesaban caras de verdad, porque eso siempre se nota en pantalla?, apuntó.
También habló sobre la participación de varios comediantes y dijo que lo importante era buscar al actor adecuado para cada uno de los personajes.
?Sé que hay un collage de todo tipo de actores, pero creo que la película también camina por una línea distinta a la habitual, y siempre me ha gustado correr riesgos, y yo creo que ellos también corrieron riesgos al estar en un proyecto como éste?, subrayó.
Gómez expresó su orgullo porque ésta, su tercera película (antes El Sueño del Caimán y El Agujero) haya recibido apoyo de Videocine y el Fidecine, pues considera que su carrera en el arte se abrirá con un paso seguro, la gente disfrutará de sus historias y, al mismo tiempo, logrará llegar a un mayor público.
?Ojalá que los nuevos cineastas arriesguen a contar otro tipo de historias como yo, no importa los años que pasen, lo importante es que el espectador pase un buen rato viéndola?, comentó.
Puños Rosas, rodada en cinco semanas, ?es una historia de amor honesta?, según su director, estelarizada por Isela Vega, Rodrigo Oviedo, José Yenque, Roberto Espejo, Adal Ramones, Omar Chaparro y Cecilia Suárez, entre otros.
Hablada en ?spanglish?, Puños Rosas se presentó con éxito en festivales de cine de Hamburgo, Alemania; Amiens, Francia; Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, Cuba, y en el Museo Guggenheim de Nueva York.
