Señalan firmas laguneras que está “en juego” el derecho a utilizar su nombre comercial dentro del mercado
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- La falta de una respuesta oportuna y el rezago de hasta cinco años en las solicitudes de registro de marca presentadas ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), generó ayer gran malestar entre los empresarios que se reunieron con los representantes de este organismo federal.
La posibilidad de perder el derecho a utilizar su nombre comercial dentro del mercado, provocó que la plática no se llevara a cabo como se tenía programado en las instalaciones de la Secretaría de Economía, subdelegación Torreón, ya que cada uno de los asistentes tomaba la palabra para manifestar su inconformidad, sin dar oportunidad para atender cada uno de los casos.
Aunque no se resolvieron los casos pendientes, los voceros del IMPI atendieron de acuerdo a la lista de asistencia, por espacio de media hora, a los representantes legales o pequeños empresarios que pidieron una solución a su problema, ya que en algunos casos manifestaron que operan con su nombre comercial desde hace 60 años, pero su solicitud no ha tenido una respuesta satisfactoria desde hace dos años.
Alfonso Amador Salazar, director de Grupo Colorama, fue quien mostró más su inconformidad ante los representantes del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual, ya que desde hace varios años presentó la solicitud correspondiente y es hasta ahora que se le notifica que una empresa fabricante de calendarios de Monterrey ya tiene registrada esa misma marca.
La empresa dedicada a la industria de las artes gráficas desde hace 20 años corre el peligro de perder su marca propia, por lo que manifiesta que es necesario se tenga un representante en La Laguna para disminuir los tiempos de espera o respuesta. Aunque el entrevistado no niega que puede seguir utilizando su nombre comercial, reconoce que existe el riesgo de ser demandado por violar la Ley de la Propiedad Industrial.
El Colegio Los Ángeles de Torreón, S.C. es otro caso que fue atendido en la reunión de ayer. María Isabel Gallardo Arellano, representante legal, explica que desde hace 60 años la institución educativa opera bajo esta marca, cumpliendo con los lineamientos que marca la Secretaría de Educación Pública. Debido a que su nombre está bien posicionado dentro del mercado, nunca habían considerado la necesidad de registrar su marca ante el IMPI.
Sin embargo, hace dos años, vieron la necesidad de hacerlo y presentaron su solicitud. No obstante, los resultados a la fecha son que no ha sido aceptado su registro, debido a que ya existe un kinder que opera bajo el nombre Los Ángeles en Matamoros, Coahuila, por lo que su caso está pendiente de resolver.
La entrevistada manifiesta que sí hay preocupación ante la mínima posibilidad de perder el derecho de marca, ya que la institución educativa que representa no podría cambiar de nombre de la noche a la mañana.
Cony Torres Contreras, contadora de representaciones Lunamar, señala que la solicitud fue presentada en 2000, sin embargo, después de cinco años no le resuelven su caso.
Con más de diez años dentro del mercado regional, la empresa enfrenta el problema que se tiene registrado una marca comercial similar, motivo por el cual deberá esperar un lapso de seis meses para tener una respuesta definitiva.
Aunque no se queda del servicio que ha recibido por parte de la Secretaría de Economía, subdelegación Torreón, manifiesta que la atención y tiempo de respuesta por parte del IMPI deja mucho que desear.
Gabriela Pérez Brunet, propietaria de Productos Alimenticios La Gaviota, que cuenta con dos años de estar comercializando alimentos en tiendas comerciales. La solicitud fue presentada hace un año, sin embargo, es tiempo que no ha tenido respuesta. Debido a las dificultades que se tienen para que una pequeña empresa logre posicionarse dentro del mercado, teme no tener la autorización para registrar su marca propia y evitar que otras empresas hagan uso indebido de su nombre comercial.
Evaluarán caso por caso
Lorena González Pacheco y Juan Ángel Garza Vite, supervisora de marcas y especialista en Propiedad Industrial del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), explican que no todo esta perdido para aquellos casos en donde la empresa –quien tiene muchos años operando su marca propia, pero sin registrarla ante el instituto-, hayan tenido un fallo negativo por existir una igual o similar.
En su visita a esta ciudad para atender solicitudes pendientes de los empresarios laguneros, Juan Ángel Garza comenta que evaluarán cada uno de los casos presentados, por lo que considera que no debe existir temor ante la posibilidad de perder su derecho de utilizar su marca propia, por carecer de su registro.
Lorena González reconoce que muchas empresas familiares que tienen muchos años de operación en la localidad mostraron desinterés –en su momento- de presentar una solicitud de registro ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, por lo que ahora corren el peligro de perder su derecho a utilizar su marca en sus operaciones comerciales.
Ambos especialistas declararon que hoy en día existen empresarios que no ven como una inversión su marca propia, por lo que no muestran gran interés en registrarla y evitar que otras empresas dentro y fuera de la región la utilicen para comercializar sus productos y servicios en base a su prestigio.
En cuanto a la respuesta de empresas de La Laguna, Lorena González manifiesta que ha crecido el interés en hacer el registro correspondiente, cultura que ha ido en aumento en los últimos años. Sin precisar las cifras reportadas en 2004, comenta que poco a poco los empresarios están más interesados en proteger sus marcas y patentes.
