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LA PAZ, BOLIVIA.- Existe en Bolivia un “cuadro propicio” para que se produzca un golpe de Estado ya que permanece la incertidumbre política pese a que Carlos Mesa dijo que se quedará en el poder hasta el fin de su mandato, publicó un diario local.
En un mensaje televisado a la nación, Mesa despejó los rumores y versiones de algunos de sus allegados que indicaban que si el Legislativo denegaba su solicitud renunciaría irrevocablemente.
Pero en su locución señaló que no le dará “la espalda a Bolivia” y que se mantendrá en el cargo para no cederlo a alguien, como el presidente del Senado, Hormando Vaca Díez, “que no tiene la legitimidad del voto”.
El periódico señaló que “por más que oficialmente se desvirtúen los rumores, lo sucedido en las últimas horas en el Ejecutivo y en el Legislativo configuran un cuadro muy propicio para los que sueñan con alguna aventura golpista”.
“Lo peor que le puede pasar a Bolivia es volver a caer en manos de un régimen dictatorial. No importa de dónde venga el golpe ni qué matices tengan los que pudieran imponer un régimen inconstitucional. Sería, sin duda, un retroceso desde todo punto de vista”, añadió.
Mesa, un periodista e historiador de 52 años de edad que llegó al poder en octubre de 2003, anunció el seis de marzo pasado que renunciaría a su cargo, pero dos días después fue ratificado en el poder por el Congreso boliviano.
El martes pasado, en tanto, pidió convocar a elecciones generales anticipadas para intentar solucionar la grave crisis político social, pero el Legislativo rechazó esa propuesta la víspera.
El diario boliviano se preguntó, “¿Qué hemos hecho hasta hoy para obligar a quienes nos gobiernan y nos representan a dejarse de tanta payasada y manipulación de las emociones ciudadanas, para establecer de una vez por todas las bases de un acuerdo mínimo?”.
“Hay tanta confusión en los mensajes, tanta o más distorsión de los mismos, que terminamos discutiendo cosas intrascendentes o yéndonos por las ramas mientras que la amenaza de una ruptura institucional avanza peor que el tsunami asiático”, alertó.
Aseveró que “el país está en manos de un Gobierno que no gobierna, con todas las prerrogativas que le da la Constitución Política del Estado, un Congreso Nacional divorciado del primero y sujeto a los vaivenes de una representación política”.
El rotativo boliviano señaló que el Ejecutivo dejó de ocultar su “desprecio” hacia los otros poderes del Estado y parece más bien “estar decidido a anularlos” para “gobernar en forma solitaria”.
Por su parte, otro diario acotó que Mesa declinó precisar cómo gobernará en los próximos meses ya que, “pese a su fracaso, no deja la idea de anticipar los comicios generales, en tanto los partidos y organismos proponen la búsqueda de un pacto nacional”. Explicó que esas “marchas y contramarchas” del gobernante generaron incertidumbre e irritación en los políticos, tras lo cual citó palabras de Mesa respecto a que se mantendrá en el cargo porque descarta entregar el poder “a quien no tiene legitimidad del voto”.
El periódico recordó que, a diferencia de la semana pasada, cuando se intentó un acuerdo entre Ejecutivo y Legislativo, “esta vez ambos poderes están más enfrentados” al recordar que el Congreso rechazó el pedido de Mesa de adelantar las elecciones generales.
