EL PAÍS
BRUSELAS, BÉLGICA.- La posibilidad manejada ayer por los líderes europeos de que la cumbre se clausure sin un acuerdo sobre el marco financiero de la Unión Europea (UE) ha creado alarma en Bruselas. “Se sumaría un problema a otro problema (el de la Constitución)” y, “sin acuerdo (sobre Perspectivas Financieras), la UE se hundirá en la parálisis”, advirtió el presidente de la Comisión, José Manuel Durão Barroso.
Si no hay acuerdo en esta cumbre, cabe la posibilidad de que se alcance en los próximos meses o que el bloqueo se prolongue durante años. En ambos casos, las consecuencias serán muy negativas, dado que las actuales Perspectivas Financieras en vigor, las terceras de la Unión, concluyen el 31 de diciembre del año que viene.
En caso de retraso, hay que tener en cuenta que se necesitan entre 12 y 18 meses para preparar las bases legales y reglamentos para fijar y aprobar los programas multianuales sobre investigación, cohesión, educación, desarrollo… El actual marco financiero, en vigor desde enero de 2000, fue pactado en la primavera de 1999. Ya era tarde y algunos importantes programas financiados con fondos estructurales no contaron con el dinero adecuado hasta 2002. Si ahora no se alcanza un acuerdo pronto, el 40 por ciento del presupuesto de la UE estará bloqueado en enero de 2007.
Si no hay acuerdo, la Unión tendrá que prorrogar mes a mes sus gastos más indispensables basándose en los presupuestos anteriores. Técnicamente, es posible prorrogar los presupuestos durante dos años más, pero, en la práctica, resulta imposible. El motivo es que en tal caso, no habría base legal para financiar los gastos de los diez países incorporados en 2004 y que ahora reciben dinero de una partida extraordinaria creada para el periodo comprendido entre el primero de mayo de 2004, fecha de su incorporación, y el 31 de diciembre de 2006.