La protección permanente del seguro será de hasta un millón 400 mil pesos
Notimex
MÉXICO, DF.- Los depósitos de los grandes usuarios del sistema bancario en México estarán descubiertos ante una eventual quiebra de alguna institución bancaria, a diferencia de los pequeños y medianos ahorradores, que están a salvo, de acuerdo con disposiciones que entraron en vigor el pasado primero de enero.
A partir de este año inició la última etapa de disminución de cobertura del seguro de depósito a cargo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) que protege a los ahorradores ante la insolvencia de una institución bancaria.
De esta forma, la cobertura permanente de este seguro será de hasta 400 mil UDI’s (Unidades de Inversión) o de un millón 400 mil pesos, lo que significa que 98 por ciento de las cuentas bancarias y 60 por ciento del dinero depositado en el sistema bancario estará plenamente asegurado.
Este monto, añade, enfoca el seguro de depósito en favor de los pequeños y medianos ahorradores, en tanto que sólo quedarían descubiertos los depósitos de los grandes usuarios del sistema bancario.
Al respecto, el vocal ejecutivo del IPAB, Mario Beauregard, dijo que el sistema financiero en México está muy bien capitalizado, en alrededor de 14 o 15 por ciento y que el pequeño ahorrador está perfectamente cubierto por lo que “no hay absolutamente nada qué temer”.
Los bancos como intermediarios entre ahorradores y usuarios de crédito, son una parte importante del eslabón en el sistema de pagos de un país, toda vez que transforman los depósitos que reciben -generalmente obligaciones de corto plazo- en créditos, usualmente de mayor plazo.
El vocero del IPAB explica que dado que el otorgamiento del crédito implica asumir riesgos y las actividades de inversión de los bancos no siempre producen los resultados deseados, en algún momento estas instituciones pueden atravesar por problemas de solvencia.
En México, como en muchos otros países, los depósitos están cubiertos por un seguro con el propósito de proteger a los ahorradores.
La experiencia internacional ha demostrado que una cobertura absoluta contra pérdidas tiende a crear efectos contrarios a las sanas prácticas y a usos bancarios, mientras que contar con este tipo de protección fomenta que instituciones y ahorradores incurran en riesgos más allá de lo debido.
Nueva Ley
En 1999 entró en vigor la Ley de Protección al Ahorro Bancario (LPAB), que establece, a través del Programa de Transición, la manera en que serán reducidos progresivamente y hasta 2005 los tipos de servicios bancarios y los montos asegurados. Esta transición busca promover una cultura de manejo de riesgo en el sector financiero.
Luego de la entrada en vigor de la LPAB, los depositantes con saldos descubiertos por el seguro de depósito tienen incentivos para valorar la situación de las instituciones en las que confían sus recursos, coadyuvando así con la labor de las autoridades.
De acuerdo con el nuevo régimen de cobertura limitada del seguro de depósito, a partir de la entrada en vigor de la LPAB -el 19 de enero de 1999- y hasta fines de ese año, el IPAB garantizó el reembolso de casi todas las obligaciones a cargo de las instituciones de banca múltiple.
Entre 2000 y 2002 fueron eliminadas las garantías a operaciones de derivados financieros sobre acciones y metales, movimientos financieros realizados en bolsas, depósitos en garantía de recaudaciones de impuestos, contribuciones a favor de la Tesorería de la Federación y cuentas liquidadoras de valores.
Desde 2003 y hasta enero de 2005 se fueron reduciendo el importe asegurado de los instrumentos cubiertos. En 2003 quedaron aseguradas las obligaciones que no fueron descubiertas en etapas anteriores del programa hasta por diez millones de Unidades de Inversión, monto equivalente a 34 millones de pesos.
El año pasado, la cobertura fue igual al equivalente en pesos de cinco millones de UDI´s, unos 17 millones de pesos. A partir del primero de enero de 2004 y de forma indefinida, sólo se garantizarán los depósitos a la vista, retirables en días preestablecidos, de ahorros y a plazo, que corresponden a las obligaciones establecidas en las fracciones I y II del artículo 46 de la Ley de Instituciones de Crédito.
Así, el primero de enero de 2005 inició la cobertura permanente de hasta 400 mil UDI´s, de aproximadamente un millón 400 mil pesos.
Expansión
El mayor crecimiento económico y la estabilidad de precios son los factores macroeconómicos que han influido en la expansión del crédito bancario en México, consideró el Grupo Financiero BBVA Bancomer.
Destacó que ambos factores disminuyen el riesgo de otorgar crédito, pues permiten que los deudores cuenten con los recursos para liquidar sus pasivos y que las tasas de interés se mantengan en niveles accesibles para los usuarios del crédito.
“Mientras estas condiciones macroeconómicas prevalezcan el crédito crecerá a tasas altas”, confió la institución financiera en un estudio sobre el financiamiento bancario.
Destacó que en noviembre de 2004, el saldo de la cartera de crédito vigente total otorgado por la banca comercial al sector privado no bancario mostró una tasa de crecimiento anual real positiva de 21.3 por ciento, similar a la del mes anterior. A partir de junio de 2004 sus cuatro componentes -consumo, vivienda, empresas e intermediarios financieros no bancarios- han presentado tasas de crecimiento reales positivas, lo cual se ha reflejado en un mayor ritmo de expansión de la cartera de crédito vigente total.
BBVA Bancomer señaló que el crédito al consumo ha consolidado su proceso de expansión a tasas altas. Comentó que en 2003 su tasa de crecimiento anual real promedio del crédito al consumo fue de 37.2 por ciento y en los primeros 11 meses de 2004, ésta aumentó a 45.8 por ciento, la cual es ligeramente inferior a 47 por ciento registrado en noviembre de 2004.
Explicó que su favorable desempeño se debe a la introducción de nuevos productos de financiamiento, como los créditos otorgados hasta por cuatro meses de sueldo a las personas que laboran en empresas que depositan el sueldo de sus trabajadores en una cuenta bancaria.
Comportamiento
Los especialistas señalan que en la medida en que la economía tenga un crecimiento, en ese mismo nivel se incrementará
el financiamiento bancario en México.
Las instituciones bancarias también han desarrollado esquemas crediticios a tasas de interés fijo para adquirir bienes de consumo duradero.
*El crédito a la vivienda también ha consolidado su proceso de expansión, el cual se ha reflejado en una tasa de crecimiento real anual de su saldo cada vez mayor.
n En noviembre de 2004, ésta fue de 22.8 por ciento, y su reactivación continuará en tanto los bancos conserven los esquemas crediticios a tasas de interés fijas a niveles menores de 15 por ciento, lo cual permite que este tipo de créditos sea
accesible para un amplio segmento de la población.
*De enero a mayo de 2004 el crédito a las empresas se
contrajo, de junio a septiembre creció paulatinamente y en este último mes su tasa fue 5.2 por ciento, mientras que en octubre su crecimiento aumentó a 11 por ciento y en noviembre fue de 10.7 por ciento.
*El mayor ritmo de crecimiento de este tipo de crédito se reflejó en un importante aumento en el ritmo de expansión del crédito vigente total, debido al gran
peso relativo que éste tiene en la cartera crediticia total.
* BBVA Bancomer reportó que en noviembre pasado el crédito otorgado a los intermediarios financieros no bancarios mostró una tasa de crecimiento anual real de 37.3 por ciento.
* El dinamismo de este crédito bancario, junto al otorgado directamente a las empresas, refleja la mayor demanda de financiamiento de las unidades
productivas debido al mayor nivel de actividad económica.
FUENTE: Agencias