EL IZQUIERDISTA PROMETE CAMBIAR A MÉXICO.
El jefe de Gobierno reconoció que es imprescindible continuar con el combate de la delincuencia.
México, (EFE).- El izquierdista Andrés Manuel López Obrador presentó hoy su último informe como alcalde de la Ciudad de México y prometió buscar la candidatura presidencial para "transformar al país".
El líder se cree una "víctima de la derecha" y ello le ha permitido ganar popularidad, según los analistas.
Flanqueado por la bandera mexicana, López Obrador se despidió como alcalde ante unos 8,000 seguidores congregados en el Auditorio Nacional, que le saludaron como "un rayo de esperanza para los pobres y excluidos".
"Obrador, Obrador, por un México mejor", "La lucha continúa" y "Eres nuestro líder", fueron algunas consignas coreadas por los admiradores del favorito en las encuestas de intención de voto para los comicios presidenciales de julio de 2006.
Al frente del gobierno de la populosa Ciudad de México desde diciembre de 2000, el líder izquierdista dijo retirarse del cargo con la satisfacción de haber socorrido a los pobres, combatido la delincuencia y la corrupción, construido obras de infraestructura y haberse relacionado "sin problemas" con los empresarios honestos.
"Ningún empresario encontró obstáculos para invertir en la capital. Sólo no tuvieron cabida los traficantes de influencias ni los que están acostumbrados a medrar al amparo del poder político", dijo el alcalde saliente, interrumpido a menudo por los aplausos.
López Obrador, que en abril sorteó un proceso de desafuero al que fue sometido acusado de desobedecer a la justicia y abusar de su autoridad, agradeció hoy "al pueblo bueno, informado y consciente y generoso que me ha sacado a flote a los momentos más difíciles".
El presidente mexicano, Vicente Fox, ordenó en abril a la Fiscalía, que depende del Ejecutivo y no del Poder Judicial, archivar la causa contra el líder izquierdista, su rival político, después de que el alcalde encabezara protestas callejeras que llegaron a reunir a cientos de miles de personas.
De haber prosperado el proceso, López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD, izquierda), hubiese perdido sus derechos políticos y quedado inhabilitado como candidato a la Presidencia.
El alcalde saliente afirmó hoy de que sus adversarios le atacan e intentaron "hacerle a un lado" porque "no toleran" que haya aplicado en Ciudad de México "otra forma de hacer política, más humana, honesta y esperanzadora".
Añadió que quienes promovieron su desafuero buscaron, en última instancia, "cerrarle el paso a un proyecto alternativo de Nación y perpetuar la corrupción y los privilegios de siempre".
López Obrador, antiguo militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó de manera hegemónica entre 1929 y 2000, apeló hoy al apoyo popular para ganar los comicios de julio de 2006 y llevar a la izquierda al poder federal por primera vez en la historia de México.
"Ahora más que nunca me atengo a la voluntad popular y, al mismo tiempo, me atengo a la confianza de la gente. A partir de hoy dejo la jefatura del Gobierno (de la capital) porque voy a luchar, junto con muchos mexicanos por una verdadera transformación del país", enfatizó.
El líder izquierdista ha criticado la concentración de la riqueza y el crecimiento de la pobreza en México, país de 105 millones de habitantes, y ha negado "similitudes políticas" con el presidente venezolano, Hugo Chávez, tal como afirman sus críticos.
También ha prometido que, de llegar a la Presidencia, buscará que la relación con EU y Canadá "vaya más allá del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ampliándola a la cooperación para el desarrollo" y que los temas de la migración y los derechos humanos serán prioritarios en su relación con Washington.
López Obrador, que tiene previsto registrarse mañana como candidato e iniciar en breve una gira proselitista, será sucedido en el ayuntamiento capitalino por el actual secretario de Gobierno, Alejandro Encinas, a quien encomendó hoy "seguir abatiendo la inseguridad en Ciudad de México como una tarea de primer orden.
Perfil
López Obrador, de 52 años y nieto del militante comunista español José Obrador Revueltas, figura a la cabeza de las encuestas de intención de voto para los comicios de julio de 2006, cuando se escogerá al sucesor del presidente Vicente Fox, su rival político.
El ex alcalde, máxima figura del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), ha prometido redimir a los pobres de México y redistribuir el ingreso en un país de 105 millones de habitantes, con una altísima renta petrolera y que ha negociado 42 Acuerdos de Libre Comercio con otras naciones.
López Obrador ha criticado "la voracidad" de los banqueros, aunque se ha aproximado a otros potentes empresarios mexicanos, como el magnate Carlos Slim, considerado el hombre más rico de América Latina con una fortuna de más de 23 mil millones de dólares.
El líder izquierdista acusó en el último año a Fox, al ex mandatario Carlos Salinas de Gortari (1988-94), considerado muy cercano a Slim, y a otros "representantes de la derecha" local, de urdir un "complot" para bloquearle en su aspiración política.
Un proceso de desafuero impulsado el semestre pasado por la Fiscalía General, que depende del gabinete de Fox, que finalmente fue archivado, era parte de ese "complot", según López Obrador.
El dirigente del PRD, considerado un político hábil, aprovechó el proceso de desafuero y las críticas de Fox para presentarse como un "perseguido por el actual sistema", que él ha ofrecido cambiar para "favorecer a los pobres".
"López Obrador consiguió llevar más agua a su molino y granjearse la simpatía de muchos mexicanos que hasta entonces se habían mostrado apáticos ante la política", comentó a EFE el analista Gabriel Gutiérrez, profesor de Ciencias Políticas.
En los momentos más controvertidos del proceso de desafuero, sus seguidores llegaron a considerarlo como "un mártir de la política mexicana", mientras su popularidad crecía más allá del Distrito Federal, el bastión del PRD.
López Obrador, que militaba en el PRI en el petrolero estado de Tabasco (sureste), ha destacado como un político combativo, abrazando siempre las ideas socialistas que le inculcó su madre, Manuela, que a su vez las tomó de Obrador Revueltas, según los comentaristas.
Obrador Revueltas, oriundo la localidad española de Ampuero (Cantabria), llegó como exiliado a México en la década del 30, bajo la protección del presidente Lázaro Cárdenas (1934-40), considerado un progresista por haber nacionalizado el petróleo.
Un hijo del ex mandatario, el fundador del PRD y cuatro veces aspirante presidencial Cuauhtémoc Cárdenas, anunció hace un mes que declinaba disputar la candidatura del partido con López Obrador, lo que, a juicio de otros analistas, le abrió las puertas éste.
Siempre polémico, López Obrador protagonizó en 1994 una controversia con el ahora líder del PRI, Roberto Madrazo, quien aspira a ser candidato presidencial, por un supuesto fraude a favor de este último en las elecciones para gobernador de Tabasco.
Sus adversarios lo acusaron de haber encabezado una violenta marcha de protesta, que primero bloqueó el acceso a pozos petroleros en Tabasco y después llegó a la Ciudad de México, de la que López Obrador se convirtió en alcalde el año 2000, alegando siempre ser un "perseguido por la clase dirigente tradicional".
Desde los años 90, los dos dirigentes se convirtieron en adversarios irreconciliables, lo que le ha puesto más "picante" a la próxima carrera electoral, pues Madrazo figura en las encuestas como el aspirante del PRI mejor situado y en el segundo lugar de las intención de voto, justo detrás de López Obrador.
Madrazo ha dicho que espera derrotar "otra vez" a López Obrador, mientras éste ha indicado que se propone llevar por primera vez en la historia a la izquierda mexicana a la Presidencia de la República y enterrar a "la vieja y corrupta política" que, según él, encarna el aspirante del PRI.