EFECTOS | LA MADRUGADA DE AYER ALCANZA UNA MARCA HISTÓRICA
El precio promedio del petróleo cierra la jornada en 67.20 dólares por barril
Agencias
Nueva York, EU.- El precio del petróleo cerró ayer a 67.20 dólares el barril, por debajo de la marca histórica de 70 dólares que alcanzó la madrugada de ayer, después que el huracán Katrina perdiera intensidad y se templaran los mercados.
El crudo de referencia West Texas Intermediate (WTI), para entregas en octubre, acabó la sesión en Nueva York en los 67.20 dólares por barril, 1.07 dólares o 1.6 por ciento más que el precio de cierre del pasado viernes.
Esto, después de que esta madrugada llegara a los 70.80 dólares por barril, subiendo 4.67 dólares o 7.1 por ciento, el mayor repunte de los últimos 29 meses provocado por el cierre de las plataformas petroleras del Golfo de México por la llegada de Katrina.
El miedo a los destrozos que el huracán pudiera causar en la infraestructura petrolera de la zona hicieron que se encendieran las alarmas. Así, la capacidad de refinería de dichas plataformas cayó en un millón de barriles al día.
Pero durante la jornada Katrina fue perdiendo fuerza y pasó de categoría cinco a uno lo que hizo que fueran erróneas las previsiones sobre los daños y causó un optimismo que contagió los mercados.
No obstante, la producción de crudo se verá afectada durante algunas semanas. Por ello, el presidente estadounidense George W. Bush analizaba este lunes liberar petróleo del acumulado como reservas estratégicas nacionales para contrarrestar los efectos del huracán.
Según señalaron fuentes oficiales, la decisión podría ser anunciada ayer, aunque los detalles de la operación no fueron precisados pero analistas financieros lo daban por hecho.
Recordaron que Bush adoptó una medida similar, al autorizar un préstamo de crudo procedente de la llamada Reserva Estratégica de Petróleo, el año pasado para ayudar a las refinerías afectadas por el huracán Iván, en septiembre de 2004.
Entonces, el Gobierno prestó 5.4 millones de barriles de crudo a cinco empresas, que se lo devolvieron en abril de este año.
El objetivo es no interrumpir la marcha de la producción de la zona afectada y frenar el alza de los precios del petróleo.
?Nadie sabe exactamente el alcance de los daños. Los rumores apuntan a que serán mayores que los causados por Iván pero no lo sabremos hasta dentro de unos días, cuando las compañías petroleras desplacen hasta allí a su personal y evalúen la situación?, dijo Marshall Steeves, analista de Refco Group.
El huracán Ivan disminuyó la producción hasta en 45 millones de barriles de crudo a lo largo de seis meses.
Según Kenneth Medlock, especialista de la Universidad Rice, señaló que en el corto plazo los precios seguirán altos, por lo menos hasta que se comprueben los daños.
?La única manera de evitar que tengamos precios aún más altos es si el presidente Bush libera petróleo de la reserva nacional?, dijo David Thurtell, estratega del Australia?s Commonwealth Bank.
Por su parte, Bernard Weinstein, profesor de la Universidad de North Texas, indicó que no son todo malas noticias tras el paso del huracán, a pesar de señalar que los precios seguirán altos.
?Pero Katrina, que llevará millones de dólares a la región en reconstrucción y reparación de daños, también estimulará la economía de la región?, indicó el especialista.
Según las primeras previsiones, los daños causados podrían alcanzar los 25 mil millones de dólares, una cifra sensiblemente inferior a la manejada en un principio.
Por otro lado, las presiones alcistas del crudo se tradujeron en la subida entre 25 y 30 centavos de dólar por galón (3.7 litros) de gasolina, pudiendo llegar a final de semana, según diversos analistas, a los 2.75 dólares por galón.
Muchos señalan que la marca psicológica de los tres dólares por galón no está muy lejana en el tiempo, lo que podría dañar la marcha de la economía nacional al mermar la capacidad de gasto de los ciudadanos y dañar las cuentas de resultado de las grandes compañías.
Impacta crudo a la CFE: Elías Ayub
El director de Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub reconoció que el incremento en los precios de los combustibles para generar electricidad impactan las finanzas de la paraestatal en diez mil millones de pesos en lo que va del año, equivalente a una quinta parte de los subsidios que anualmente otorga para compensar el rezago tarifario.
A pesar de esto, aseguro, que el Gobierno no tiene previsto incrementar las tarifas eléctricas.
En el marco del Foro "Electricidad en México 2005", organizado por Canacintra, el funcionario señaló que el sector seguirá dependiendo de combustibles como el gas natural, carbón, combustóleo y gas licuado de petróleo, para generar la electricidad que demanda el país.
Incluso aseguró, que se seguirán importando volúmenes importantes de estos energéticos.
Elías Ayub reconoció que los precios de estos productos están sujetos a los vaivenes del entorno internacional y en consecuencia se tornan vulnerables a las cotizaciones que privan actualmente en el mundo.
Actualmente el precio del gas natural oscila entre seis y 6.50 dólares por millón de BTU (Unidad Calorífica), mientras que el sector energético presupuesto un precio para este año de 4.5 dólares, una diferencia que encarece los costos de producción de empresas privadas y las finanzas de CFE.
En este sentido, Carlos Mireles García, presidente del foro y representante de los industriales de la transformación del país explicó que los altos costos de los combustibles le impacta al sector empresarial por dos vías: Una, al comprar electricidad cara, y dos, porque requiere para mantener operando su planta productiva gas natural, que por si solo tiene ya un sobreprecio de casi dos dólares por millón de BTU.
Para los industriales, el precio del gas natural se ha incrementado en mil 40 por ciento en los últimos dos años, lo que esta provocando el es trangulamiento del sector productivo y el desmantelamiento de miles de empresas que han tenido que cerrar.
Pese a este panorama, el director de CFE aseguro que México tiene garantizado el abasto de energía eléctrica para los próximos cuatro o cinco años, para lo cual se están licitando obras como las hidroeléctricas La Parota y El Cajón.
