Gómez Palacio

Tiene 80 años pero se siente de 15

FABIOLA PÉREZ-CANEDO HERRERA

EL SIGLO DE TORREÓN

GÓMEZ PALACIO, DGO.- Todos los días camina por la plaza principal de Gómez Palacio, mientras baila y pide dinero a las personas, que gasta en cigarros. Cuenta que se llama Ana María López de Lara, que vive cerca de este paseo público y gusta de platicar con la gente.

Dice que tiene 15 años, luego se queda pensativa y agrega: ?o no sé... ya no me acuerdo?. Su aspecto es el de una anciana, pero juega a dar vueltas y coquetea con los señores como si fuera una niña, su mirada también es infantil. Sus manos refieren que pronto cumplirá los 80 años.

Se acerca a las personas, les da la mano y conversa un rato para ?romper el hielo?, luego les pide dinero y honestamente confiesa: ?para un cigarro?. Comenta que no ha comido pero no le interesa, sólo busca bailar para divertirse y fumar para olvidar el apetito.

Ana María responde rápidamente a las preguntas, su tono es muy bajito, musita algunas palabras y su voz es casi imperceptible.

Deambula por la plaza, cuando encuentra atractivo a algún hombre, le toma por el brazo. Los señores se sorprenden y se alejan, algunos riendo, otros molestos por el ?atrevimiento? de la anciana, que busca una pareja que la acompañe a bailar una pieza.

Las personas que asisten con frecuencia a la plaza ya la conocen, los policías también. La saludan y le preguntan cómo está, pero se alejan cuando ella les invita a bailar con su música interna. Pareciera que una melodía suena en su cabeza, ella se mueve al ritmo que escucha sin importar que la miren o que la llamen ?loca?.

Le disgusta que haya basura tirada en la plaza. Mientras camina recoge los papeles que observa en el suelo. Su complexión es delgada, lleva un vestido rosa pálido con un suéter de un tono más fuerte y zapatos de tacón alto en un color rosa mexicano.

La anciana se toma el vestido con ambas manos y lo ondea mientras mueve los pies de un lado a otro, lentamente, en ocasiones da algunos giros y suelta su ropa para elevar sus brazos arriba y abajo.

Lo que más le molesta es que la gente se burle de ella, pues asegura que no está loca. Ana se retira bailando, gira y saluda de mano a todas las personas que pasean por la plaza, mientras busca un compañero que acompañe su danza.

Leer más de Gómez Palacio

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Gómez Palacio

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 136102

elsiglo.mx