Los felinos humillan en el Corona al Santos 4-1, el equipo albiverde no mostró ni pies ni cabeza.
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Solamente 13 minutos bastaron para que Tigres, de la mano y contundencia del argentino Walter Gaitán, vapuleara 4-1 a un desdibujado, inoperante y desmoralizado Santos Laguna, en partido que cerró la jornada tres del Apertura 2005 en un casi lleno Estadio Corona.
El diez felino fue amo y señor de la media cancha, ante la complacencia y pasividad de los volantes albiverdes, quienes nunca pudieron contener al ?Divino?, que brilló ayer con sus anotaciones, asistencia y responsabilidad ejecutora de su equipo.
Corría apenas el minuto tres cuando el sudamericano adelantaba a los universitarios por la vía del penal, y al 13 aumentaba la ventaja. Antonio Sancho anotó al 16 de la parte inicial, mientras que Javier Saavedra al 47 de tiempo corrido completó la obra. Por los laguneros se estrenó Antonio Olvera a los 50 minutos, metiendo el de la honrilla.
Prácticamente los Guerreros, que ayer olvidaron el mote, salieron del vestidor con desventaja en el marcador, ya que el joven Jesús Palacios fue derribado dentro del área por ?La Mona?, para que el debutante Miguel Ángel Chacón, decretara la pena máxima.
A partir de ahí los santistas navegaron sin brújula durante 87 minutos, sin actitud, coordinación, garra, coraje y trabajo en equipo. Después, con tres goles en contra, Eduardo de la Torre mandó al terreno de juego a Jair García por el joven Armando Gallegos.
La variante que se antojaba desde el arranque del juego, adelantada por las circunstancias del encuentro, no rindió lo esperado, ya que el ?Pony? Ruiz se retrasó a media cancha, en una zona donde no inquieta realmente a los rivales.
En el intervalo del bombardeo contundente de los norteños en los primeros 20 minutos, Cariño y Espinoza pudieron empatar y acortar distancias en el marcador, pero fallaron a la hora de la definición, sorprendidos tal vez por encontrarse a pocos metros del arco rival.
Los visitantes aprovecharon a la perfección las grandes lagunas en la zaga albiverde, sin emplearse a fondo ni meter el acelerador, aunque les salió cara la victoria, porque dos de sus elementos fueron expulsados en las postrimerías del encuentro.
El quinto lo cantaron en falso los universitarios, cuando sin marca alguna se levantó el central Sindey Balderas para meter certero testarazo, el cual pegó en el poste y se metió lentamente a las redes, situación que desesperó al ?Mumo? Peralta y la empujó, pero estaba en posición adelanta y la acción fue invalidada.
Javier Muñoz Mustafá fue exhibido en el segundo y tercer zarpazo felino, al mostrarse sobrado cuando realizaba la cobertura, y aunque quiso sobreponerse en las jugadas, fue superado en velocidad por Ruiz y Sancho por la pradera izquierda de Santos Laguna, que ayer se convirtió en verdadero distribuidor vial.
Sin pies ni cabeza se percibía a unos santistas, que arrastraron la cobija la húmeda tarde de ayer, porque Rodrigo no pudo ser preciso en los servicios, Jair reventó el único balón que más o menos tuvo a modo, y el ?Mati?, que reventó el penal en el poste izquierdo del ?Rorro?.
Los locales tuvieron una decena de tiros de esquina, los cuales no fueron aprovechados y fueron bien rechazados por los espigados defensores norteños. Además no concretaron varios tiros libres en los linderos del área, así como un juego peligroso en el manchón penal.
Lo grave de este asunto, es que las derrotas fueron en su feudo y vienen dos salidas muy peligrosas ante Dorados en Culiacán y las invictas Águilas en la Ciudad de México, en el mismíssimo Azteca, lo que presagia un negro panorama para la escuadra lagunera.
