Con una ceremonia el Papa se cargo oficialmente de la basílica de San Juan de Letrán, su catedral como obispo de Roma.
ROMA (AP).- El papa Benedicto XVI realizó el sábado la última ceremonia de confirmación papal al hacerse cargo oficialmente de la basílica de San Juan de Letrán, su catedral como obispo de Roma.
Miles de romanos saludaron a Benedicto mientras permanecía parado en un automóvil descapotado al llegar a la iglesia.
Los pontífices deben ser consagrados como obispos de Roma y la ceremonia tradicionalmente se realiza en la antigua basílica, que el Vaticano describe como la "madre y la cabecera de todas las iglesias de la ciudad de Roma y el mundo".
Dentro de la iglesia, cardenales, obispos y otros clérigos, ubicados en varias hileras, aplaudieron vigorosamente cuando Benedicto se sentó en el trono y sonrió.
Dialogó durante algunos minutos con una pareja y sus dos niños, que se arrodillaron ante él, mientras un coro cantaba en la basílica.
La visita a la iglesia fue la última de numerosas ceremonias realizadas después que Benedicto fue elegido Papa, el 19 de abril.
Asumió formalmente como pontífice en una misa realizada en la Plaza de San Pedro pocos días después.
"Tomar posesión" del trono de Juan representa el cuidado del Papa por todas las iglesias católicas. El pontífice lidera a toda la Iglesia como obispo de Roma y sucesor de San Pedro, el primer Papa.
Como primera basílica cristiana erigida en Roma, la iglesia de San Juan fue fundada por el emperador Constantino. Sus cimientos originales datan de comienzos del siglo V.
El altar papal contiene reliquias de San Pedro y San Pablo, y el trono de obispo está tallado en piedra y decorado con mosaicos.
El cardenal de Roma Camillo Ruini inició la ceremonia diciendo: "Padre más bendecido, la Iglesia que está en Roma se regocija al subir usted por primera vez a su trono, que es el trono romano de Pedro, en el que se fundó la Iglesia".
En una ceremonia privada realizada en la mañana en la Santa Sede, el Papa recibió al alcalde de Roma, Walter Veltroni, y le agradeció la "calidez" con la que fue acogido por los romanos.
Deseó también a los pobladores de la capital italiana "prosperidad y armonía", de acuerdo con un comunicado del Vaticano.
En una semana repleta de actividades, el Papa concretó su primer viaje afuera de Roma el jueves, al inspeccionar el palacio veraniego en la población montañosa de Castel Gandolfo.
