Los semáforos no representan gran ayuda para agilizar el tránsito
El Siglo de Durango
Es materialmente imposible que lleguen puntualmente a sus destinos los conductores que transitan diariamente por el bulevar Felipe Pescador, pues tardan hasta 25 minutos en pasar desde el ITD hasta la glorieta Guadalupe Victoria. La problemática está en los trabajos de carpeteo asfáltico y los semáforos que no ayudan a agilizar el flujo vehicular.
En un ejercicio hecho por El Siglo de Durango por la vía antes mencionada de poniente a oriente y viceversa por la glorieta Guadalupe Victoria, se perdieron aproximadamente 20 minutos en recorrer aproximadamente 500 metros en hora pico.
Esta situación ha desesperado a trabajadores, estudiantes y amas de casa que se trasladan a sus labores y llevan a sus hijos a diferentes centros educativos.
La maquinaria que está realizando los trabajos de bacheo es la causante de la desesperación de cientos de automovilistas que transitan por esta zona, aunado a los agentes de Tránsito y los semáforos que se encuentran en la glorieta del monumento al primer presidente del país.
El transporte público ha desviado sus rutas a otras calles por la lentitud del flujo vial, ya que no pueden llegar a tiempo a sus checadores, lo que causa desorden, contaminación ambiental y, por consecuencia, molestia en los usuarios por transitar por los lugares tradicionales.
Un caos si se considera que grupos de estudiantes de la Secundaria Benito Juárez se paran a media calle, obstaculizando las vías alternas de los conductores.
Cinco minutos tardó un automóvil en pasar por una calle debido a que los estudiantes no se retiraban de la carpeta asfáltica y aunque la fila de cinco autos utilizaba el claxon para expresar su molestia, los adolescentes ni se inmutaban.
Desesperante para una ciudad que no está acostumbrada a un tráfico ni de diez minutos, como en urbes grandes como el Distrito Federal, Monterrey, Tijuana, por mencionar algunas.
En el municipio de Durango 30 minutos es suficiente para llegar a cualquier parte de la ciudad en automóvil particular, pero si se tiene que pasar por esta vía se le debe agregar el tiempo que le quita la instalación de los nuevos semáforos, así como la maquinaria de bacheo, por lo que habría que sumarle otros 20 minutos, en total 40 minutos, tiempo estimado para llegar al poblado más cercano del municipio.
Un conductor que no quiso proporcionar su nombre, debido a que trabaja en una dependencia de gobierno, comentó que un día se tardó 25 minutos en pasar de la calle Francisco de Urdiñola a Cuauhtémoc, tiempo que le causó desesperación, ya que tenía que llegar a tiempo a una reunión.
Considera que la autoridad debería realizar estos trabajos por la noche, cuando esta vialidad se encuentra libre, o que traten de informar a la ciudadanía el porqué se ejecutan las obras a la hora en que más trafico hay en esta zona.
Los semáforos no ayudan en nada, ya que no están sincronizados, por lo que causan embotellamientos en las calles de salida a esta vialidad como Regato, Castañeda, Porras, Alberto Terrones.
TRASPORTE PÚBLICO
Al recibir denuncias de la ciudadanía en este medio de comunicación respecto del cambio de rutas de autobuses urbanos, el subdirector de Transportes del Estado, Víctor Manuel Castañeda Alba, admitió que es responsabilidad de la Dirección avisar de las modificaciones.
Pero debido a que esta Dirección no fue avisada de los trabajos del Municipio no previó los cambios que se darían en los itinerarios del transporte colectivo.
Precisó que la tarea de la Dirección es vigilar que el transporte se proporcione a los usuarios con seguridad, con higiene y respetando los itinerarios de las rutas y agregó que Vialidad es la responsable de regular que el tráfico se dé con fluidez.